"Un partido muy difícil de analizar" así describió Abel Gómez el duelo de alta tensión disputado en el Can Misses entre el Recreativo de Huelva y la UD Ibiza que terminó 5-2 para los celestes que se sitúan ya segundos del grupo II de Primera Federación.

El técnico albiazul admitió en rueda de prensa tras el encuentro de este domingo que fue "uno de los partidos más limpios que ha tenido como entrenador" y que finalizó con tres expulsados, "una locura" con "dos equipos que querían jugar".

El colegiado marcó el partido y se convirtió en el protagonista. Una de las acciones más polémicas fue la segunda amarilla a Josiel Núñez que Abel Gómez no pasó por alto y explicó que "solo puso el brazo y no le dio en la cara ni nada", una amonestación que efectuó "por querer compensar" según el técnico albiazul.

Godia Solé "cargó mucho con tarjetas en situaciones con brazos" que "simplemente eran por proteger", "puso el listón muy bajo y él mismo se complicó el partido" admitió el míster del Decano tras el partido en Ibiza.

Abel Gómez declaró que "es un día de los que estoy orgulloso del equipo porque lo han intentando aún con nueve jugadores e intentando atacar, pero a los chavales no se les puede pedir más y hacer dos goles aquí" es complicado ante un gran rival.

El equipo albiazul "se va jodido porque al final hace muchos kilómetros, un viaje muy largo y vienen aficionados" para un gran partido que se vio "deslucido por el arbitraje".