La Navidad es ocio, familia, recuerdos, alegría, regalos y,… sobre todo, solidaridad. Y así se puso de manifiesto ayer en Punta Umbría en el marco de la gran chocolatada con roscón de reyes gigante que, por tercer año consecutivo, organizó la delegación en Punta Umbría de la Asociación Española Contra el Cáncer –AECC- en la Plaza Blas Infante. Este popular emplazamiento se llenó de vecinos dispuestos a colaborar con tan noble causa y, de paso, a disfrutar de un magnífico ambiente navideño en la víspera de la llegada de Sus Majestades los Reyes Magos.

Con motivo de esta iniciativa los organizadores pusieron a disposición de los puntaumbrieños, por el módico precio de tres euros la porción, uno de los dulces navideños más típicos, el tradicional roscón de reyes. Sin embargo, este dulce era un poco peculiar, pues contaba con unas dimensiones gigantescas: unos 35 metros de largo para algo más de 800 comensales, acompañado del más exquisito chocolate caliente en taza. En este sentido, para satisfacer la amplia demanda de chocolate, se repartieron 200 litros.

Sin duda, esta acción se presume como una buena y dulce forma de empezar el muevo año, colaborando además con los fines de la AECC, ya que la recaudación de la cita gastronómica solidaria irá destinada íntegramente a dicha entidad, que organizó un evento en el que también participaron la pastelería La Flor de la Canela y la empresa de restauración Catering Los Mellizos. Igualmente, también quisieron colaborar las empresas locales Morhabitat y Puntaflor.

Dos jóvenes participan en la acción solidaria

Además, los asistentes disfrutaron con la actuación de forma totalmente desinteresada de varios coros de campanilleros que amenizaron el evento. Estos grupos que se dieron cita en este día tan especial fueron los formados por alumnos de quinto curso del Centro de Educación Infantil y Primaria Virgen del Carmen de la propia localidad costera; el coro de Campanilleros Santo Cristo del Mar del Centro de Mayores del municipio y la agrupación onubense La Rama.

En definitiva, esta iniciativa está considerada como una cita gastronómica solidaria que ha sido posible por tercer año consecutivo, según precisó la secretaria de la junta local de la AECC-Punta Umbría, María Isabel Martínez, gracias a la colaboración de numerosas personas y entidades como Catering Los Mellizos, que donó el chocolate a la taza, la pastelería ayamontina La Flor de la Canela, que hizo lo propio con el roscón; las empresas locales Morhabitat y Puntaflor y los grupos musicales. “Todos aportan su granito de arena de forma desinteresada para esta causa”, señaló Martínez.

El Ayuntamiento puntaumbrieño también ha colaborado con la entidad organizadora y, de hecho, la alcaldesa de Punta Umbría, Aurora Águedo, no quiso perderse la ocasión de disfrutar de una porción del roscón gigante, acompañada por varios miembros de su equipo de Gobierno.

El roscón tuvo una gran aceptación.

La secretaria de la junta local de la delegación puntaumbrieña de la AECC quiso, por último, hacer mucho hincapié en el carácter solidario de la iniciativa y señaló que los fondos recaudados servirán para seguir luchando contra el cáncer, así como para financiar el estudio y la investigación de dicha enfermedad, además de las terapias a las que deben someterse quiénes la padecen.

Como se recordó finalmente desde el Consistorio, la labor de la AECC en Punta Umbría “es encomiable” ya que “no para de organizar talleres, charlas, cenas benéficas, cuestaciones… y todo tipo de actividades a lo largo de todo el año. Asimismo, han demostrado que están muy implicados tanto en el apoyo a enfermos y familiares, como en las labores de prevención de la enfermedad, de ahí la importancia de participar en iniciativas de este tipo por parte de los vecinos”.