'capitán américa: civil war'

Multicines La Dehesa Islantilla, Cines Aqualon Puerto Huelva, CineVip Lepe, El Condado Cinemas 7, Al Andalus Punta Umbría y Cines Artesiete Holea Huelva- Producción: Francia, 2016.- T.O.: 'Captain America: Civil War'.- Duración: 147 minutos.- Dirección: Anthony Russo y Joe Russo.- Guión: Christopher Markus, Stephen McFeely, Mark Millar, Joe Simon y Jack Kirby.- Fotografía: Trent Opaloch.- Música: Henry Jackman.- Montaje: Jeffrey Ford.- Intérpretes: Chris Evans, Robert Downey Jr, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Elizabeth Olsen, Sebastian Stan, Leslie Bibb, Chadwick Stan, Daniel Brühl, Marisa Tomei, William Hurt

No es ésta, aunque alguno haya podido imaginarlo a primera vista, una entrega más a la manera que los superhéroes de la Marvel suelen mostrarse en la gran pantalla. Algo parece haber madurado en el talante y en el estilo de estos relatos en los que intervienen estos míticos personajes y algunos más que se han añadido al elenco habitual. Partimos de donde dejamos la anterior entrega, Vengadores: La era de Ultrón (2015). Y tenemos dos equipos en conflicto. Uno liderado por Steve Rogers, el Capitán América, compuesto por Falcón, Soldado de Invierno, Ant-Man, Ojo de Halcón y Bruja Escarlata. El otro capitaneado por Tony Stark, Iron Man al frente de la Viuda Negra, Máquina de Guerra, Pantera Negra y La Visión.

Capitán América manda el nuevo equipo de los Vengadores en su denodada lucha contra las fuerzas del mal que tratan de destruir a la Humanidad. Tras otro incidente internacional en el que se han visto involucrados los Vengadores y que ha producido importantes daños colaterales, las presiones políticas hacen necesaria una estrategia para depurar responsabilidades y el momento en que habrán de intervenir los servicios del equipo ejecutor. La nueva situación determinará que dos facciones de superhéroes se enfrenten cuando 117 naciones signan un acuerdo para controlar las acciones. Capitán América y los suyos se rebelan ante los acontecimientos.

Sobre lo trivial o rutinario de anteriores realizaciones los hermanos Anthony y Joe Russo han aplicado a esta nueva entrega de la saga, que aunque sea la última de una trilogía al parecer no supondrá su final, dada la rentabilidad de la serie, lo que siempre hemos anhelado en una realización cinematográfica: creatividad, inteligencia e imaginación. Son precisas sobre todo cuando se afronta una película épica como ésta donde la acción es imprescindible y se resuelve con escenas deslumbrantes y espectaculares que suponen por sí mismas la esencia de la realización. Tiene además un fundamento argumental muy propio de nuestro tiempo. La amenaza no viene del exterior, no procede de otros mundos, y aunque en esos casos pueda interpretarse como un riesgo siempre latente, en este caso es más significativo y real, más directo y contundente. Es decir que el enemigo está dentro, entre nosotros. Conspira de manera desestabilizadora y destructiva para acabar con el estado de derecho, el régimen de libertades, la inalienable separación de poderes. Es imprescindible prevalecer esas normas contra los enemigos de la convivencia, de la tolerancia, del respeto a los principios que rigen el sistema y de la paz. La película en este sentido resulta comprometida y vivaz en su realismo, tanto en la acción como en la intención.

Y esos enfrentamientos, esa persecución implacable sobre el mal y sus artífices debe articularse desde los principios de la justicia. "Si no aceptamos nuestras limitaciones no somos mejores que los malos", se dice. Con todas estas ideas y su inevitable parafernalia guerrera y demás tramas y subtramas para alentar la intriga y la espectacularidad, se advierte con vital diferencia sobre sus precedentes una notable madurez y todo ello sin que los elementos dramáticos del argumento eludan la viveza ocurrente, ingeniosa y humorística en muchas ocasiones. En suma una admirable manera de conjugar la coherencia dramática, con la rectitud en el tema y la espléndida integración de las secuencias de trepidante acción.

Quiroga