Tenía que ser así y razones no faltan. Por primera vez, desde hace más de cincuenta años, la Real Sociedad Colombina suspende la celebración pública de la tradicional Rememoración del Voto, en recuerdo del que hiciera Cristóbal Colón aquella noche del día 3 de marzo de 1493, al verse la carabela Niña y sus tripulantes en peligro de muerte ante una espantosa tormenta, cerca de las costas portuguesa, cuando regresaba del viaje dscubridor de América, camino del puerto de Palos.

Esta sencilla, y al mismo tiempo entrañable y solemne rememoración, se realiza cada año por la Sociedad Colombina, y que es recibida en el Santuario de la Patrona por la Hermandad de la Virgen de la Cinta, no se llevará a efecto a causa de las difíciles circunstancia que atravesamos de la pandemia y de los consejos de las autoridades sanitarias que deben ser obedecidos en su totalidad.

La Junta de la Colombina tomó el acuerdo por unanimidad, trasladándolo a la Hermandad de la Cinta y al Almirante de la Flota, como presidente honorario de la Sociedad. Igualmente se puso en conocimiento de todos los socios y amigos que cada año acuden al Santuario onubense a testificar esta rememoración del Voto Colombino.

Es triste, para quienes sentimos las devociones y tradiciones onubenses, no poder ver realizada esta ceremonia, tan llena de historia marinera, de amor a la Virgen, Patrona de Huelva, y notar la ausencia de la Armada Española, que siempre se sintió unida a ella con la primera autoridad de la flota.

Es triste pero necesario. La trayectoria de la mortal epidemia del Covid-19 que estamos padeciendo no podía desembocar de otra forma. Es mucho lo que nos estamos jugando para nuestra salud colectiva y hay que ser razonables y justos con las medidas a tomar. Día llegará, y lo esperamos con esperanza, en que las cosas vuelvan a la normalidad y la Ceremonia del Voto se lleve a cabo con toda solemnidad y presencia del pueblo onubense tan enraizado con su historia colombina.

Todavía parece ayer, cuando terminando la década de los sesenta del siglo pasado, me reunía con un grupo de colombinos onubenses para comunicarles la idea de volver a recordar esa promesa devocional de Cristóbal Colón que unía tanto a la hazaña del descubrimiento de América con Huelva y su Patrona la Virgen de la Cinta.

En aquella ocasión tuve a mi lado la total colaboración y entrega del Hermano Mayor de la Cinta, Curro Vázquez, y por parte de la Armada, del comandante de Marina de Huelva, Carlos Martínez Valverde. La misa del día 3 de marzo de 1970 la ofició el prior y Guardián del Monasterio de la Rábida, fray Leonardo Fuerte, y al acto asistieron todas las representacionales oficiales, onubenses, colombinos y relacionadas con el mundo de la mar. Ha pasado ya más de medio siglo y el Voto cada año unió a Huelva con su historia marinera y con su fuerte devoción y amor a su Patrona Nuestra Señora de la Cinta.

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