No se repiten los números de la Gran Recogida del Banco de Alimentos de Huelva del año pasado, pero los de éste, 120.000 kilos, siguen haciendo de esta acción una de las más importantes del año, imprescindible para la atención a quienes más la necesitan en la provincia onubense, que no son pocos: 12.500 personas al día.

En un año se han quedado en el camino diez toneladas de alimentos. Las explicación está en el descenso del número de voluntarios que se movilizan durante dos días para la recogida de artículos en supermercados y otros establecimientos en la provincia. Entre el viernes y el sábado, más de 2.200 personas han estado al pie del cañón, atendiendo a la llamada del Banco de Alimentos de Huelva. El año pasado fueron 2.500, lo que permitió la acción en 11 puntos más que los 132 de esta vez.

Puestos a encontrar una explicación, el presidente de la asociación, Juan Manuel Díaz Cabrera, cree que han podido influir varios factores: “Quizá la gente cree que la crisis ha pasado, que ya no es tan severa, y que no hace falta ya tanta ayuda de voluntariado. O quizá también somos muchas las asociaciones que pedimos ayuda de voluntariado y es difícil atendernos a todas”.

Para acabar con la duda, Díaz Cabrera recuerda que los efectos de la crisis siguen ahí, en las ciudades y en los pueblos, en los barrios donde vive cada uno, al lado de casa, donde se reparten muchas familias necesitadas para salir adelante cada día. Sólo el Banco de Alimentos de Huelva, recuerda, atiende a 12.500 personas a diario en la provincia, lo que convierte acciones como éstas en importantes puntos de apoyo de la labor que se presta a lo largo de todo el año, en el que se pueden distribuir unos 2,8 millones de productos alimenticios.

“Ha disminuido un 9% el número de establecimientos implicados en la Gran Recogida este año por esa falta de voluntarios y se ha reducido también un 9% la cantidad de alimentos recogidos”, cuenta el presidente de la asociación. “Se podía haber recogido más, pero también podía haber sido menos. Todo suma, que es lo importante”.

Esa correspondencia entre causa y efecto en la campaña no se altera por la influencia de otros factores externos, como podría haber sido este año la jornada de intensas lluvias que sufrió Huelva este viernes, primer día de recogida.

Pese a ello, el resultado ha sido tan favorable como se podía esperar, dada la generosidad habitual del público onubense, entre el que se ha detectado en el Banco de Alimentos “un poco más de alegría en las donaciones este año, también con donaciones de calidad”.

Queda un duro trabajo en la asociación esta semana, con la llegada de todos los artículos recogidos directamente en los establecimientos de manos de los donantes. Todos se clasificarán y se almacenarán, y permitirán el suministro un tiempo a esas 12.500 personas atendidas. Pero el trabajo sigue y no se detiene porque la ayuda es muy necesaria.

Josué Correa

Dos voluntarios, dirante la recogida en un establecimiento de la capital el pasado viernes.

Josué Correa

Un voluntario organiza uno de los cajones lleno ya de artículos.