El llamamiento es necesario. La lluvia no es un factor que sople a favor de que la gente salga a la calle. Un mal síntoma que sufrió ayer el Banco de Alimentos en la primera jornada de la Gran Recogida. A pesar de todo, el día “tampoco ha estado tan mal” y la climatología “no se ha notado demasiado”, señaló el presidente del Banco de Alimentos de Huelva, Juan Manuel Díaz Cabrera a este periódico. Pero sí es cierto que la lluvia “ha influido”, de ahí la necesidad de compensar la balanza en la jornada de hoy –que se espera ausente de precipitaciones– con la solidaridad de los onubenses para recaudar kilos de comida de los que se beneficiarán hasta 13.000 personas vulnerables en la provincia de Huelva.

Este año la previsión de recogida de alimentos es menor que en la edición del pasado año debido al descenso de 11 tiendas, 2 de ellas –una en Bollullos y otra en Moguer– se cayeron el jueves por falta de voluntarios. En total, los onubenses podrán donar alimentos en 132 establecimientos de toda la provincia para intentar alcanzar los 130.000 kilos que se ha marcado como listón la asociación. El hecho de que haya 11 tiendas menos que el año pasado para la gran recogida supone un descenso seguro de 10.000 kilos de alimentos, apunta a Huelva Información Juan Manuel Díaz Cabrera. Con todo, el presidente espera que los onubenses salgan a comprar en el día de hoy para sumar toda la solidaridad posible en favor de los más necesitados, además en unas fechas sensibles para muchas familias como son las semanas previas a la Navidad.

La razón que ha ocasionado el descenso de establecimientos no es otro que la falta de voluntarios. Este año el Banco de Alimentos cuenta con unas 2.300 personas, alrededor de 200 menos que en la gran recogida de 2018. “En Aracena, por ejemplo, no hemos conseguido ningún voluntario”, cuando otros años ha habido 3-4 tiendas, y en otros puntos de la provincia como Aljaraque, Moguer y Punta Umbría hay menos establecimientos, según contaba Díaz Cabrera en los días previos al evento anual en el que se consiguen más kilos de alimentos en menos tiempo. Eso sí, lo recogido entre estos dos días sólo representa una parte de los 2,8 millones de productos alimenticios que la asociación reparte a lo largo del año a sus beneficiarios, a través de diferentes ONGs.

A pesar de contar con menos establecimientos y la mala fortuna de la climatología, miles de onubenses colaboraron en la jornada de ayer en los diferentes puntos de recogida que se repartieron a lo largo y ancho de la provincia onubense. Decenas de cajas repletas de alimentos, gracias a la solidaridad de los ciudadanos, se sumaron para los más necesitados.

Como es habitual todo aquel que entre hoy en un supermercado que participe en la Gran Recogida recibirá una octavilla con los alimentos más necesarios para las familias vulnerables. “Aceite, leche, legumbres y alimentos infantiles”, son los productos que más falta hacen recoger, enumeró Díaz Cabrera. El esfuerzo, el trabajo y el sacrificio está puesto encima de la mesa. Sólo queda que hoy los onubenses llenen con comida solidaria las manos de quien más lo necesita.