En el mundo de la cocina, pocas recetas pueden rivalizar con la placer que supone un auténtico risotto a los cuatro quesos. Originario de Italia, este plato se ha ganado un lugar especial en los corazones de los amantes de la cocina por su textura cremosa y su sabor irresistible. Acompáñanos en este viaje para descubrir los secretos detrás de esta maravillosa receta para poder prepararla en casa.

El risotto es una especialidad italiana que se caracteriza por su arroz de grano corto y su cocción lenta y paciente en caldo, lo que permite que libere su almidón y adquiera una textura cremosa sin la necesidad de añadir lácteos adicionales. Sin embargo, en el caso del "risotto a los cuatro quesos", se hace una excepción para lograr una combinación de sabores única y deliciosa.

Para preparar esta delicia, se necesitan algunos ingredientes clave:

• 350 gramos de arroz Arborio o Carnaroli
• 50 gramos de mantequilla
• 1 cebolla picada finamente
• 120 ml de vino blanco
• 1,2 litros de caldo de verduras o pollo
• 100 gramos de queso parmesano rallado
• 100 gramos de queso gorgonzola desmenuzado
• 100 gramos de queso brie cortado en trozos pequeños
• 100 gramos de queso mozzarella rallado
• Sal y pimienta al gusto

Instrucciones:

1. En una cacerola grande, calienta el caldo de verduras o pollo y mantenlo caliente a fuego bajo. Es importante que el caldo esté caliente cuando lo agregues al risotto.

2. En otra cacerola grande o sartén, derrite la mitad de la mantequilla a fuego medio.

3. Agrega la cebolla picada y sofríela hasta que esté transparente y fragante, aproximadamente 3-4 minutos.

4. Añade el arroz Arborio o Carnaroli a la cebolla y revuelve bien para cubrir cada grano con la mantequilla. Cocina el arroz durante 2 minutos hasta que comience a dorarse ligeramente.

5. Vierte el vino blanco sobre el arroz y revuelve constantemente hasta que el líquido se haya absorbido por completo.

6. Ahora viene el proceso de cocción del risotto. Agrega una cucharón del caldo caliente a la mezcla de arroz y revuelve suavemente hasta que se haya absorbido por completo. Repite este paso, añadiendo caldo de a poco, hasta que el arroz esté al dente y haya liberado su almidón para obtener una textura cremosa. Esto puede tomar alrededor de 18-20 minutos.

7. Mientras tanto, en un bol aparte, mezcla los cuatro quesos: el parmesano, el gorgonzola, el brie y la mozzarella.

8. Una vez que el arroz está en su punto y la textura es cremosa, retira la cacerola del fuego.

9. Agrega el resto de la mantequilla y la mezcla de quesos a la cacerola. Remueve bien para que los quesos se derritan y se integren con el arroz. La combinación de quesos aportará una variedad de sabores y una textura increíblemente suave y cremosa.

10. Prueba el risotto y sazona con sal y pimienta al gusto. Ten en cuenta que algunos quesos pueden ser salados, así que ajusta la cantidad de sal según sea necesario.

11. Sirve el Risotto a los cuatro quesos mientras esté caliente y cremoso. Puedes espolvorear un poco más de queso rallado o hierbas frescas por encima para realzar su presentación.