La enfermería en el Recreativo de Huelva por desgracia sigue ocupada, con Rubén Cruz, Iván González, Víctor Barroso e Irizo como inquilinos, aunque su pronóstico es de diversa consideración.

A Rubén Cruz se le realizaron ayer diversas pruebas para conocer el alcance exacto de la lesión y anoche todavía no se conocían los resultados. Es baja segura para el encuentro de este domingo ante el Talavera en el debut en el Nuevo Colombino (20:00) y será sin duda una sensible ausencia para Monteagudo, ya que pierde a su pichichi de la pretemporada (4 goles). En principio, el tiempo estimado para su vuelta a los terrenos de juego es de aproximadamente un mes. Se lesionó a los 40 minutos en San Fernando.

Víctor Barroso está en la fase final de su recuperación tras sufrir una rotura en el recto anterior del cuádriceps de la pierna derecha; el extremo onubense ya fue baja en el partido inaugural de la competición y en los últimos de la pretemporada; evoluciona favorablemente de su lesión y no está completamente descartado para este domingo, aunque lo más probable es que su reaparición se retrase una semana más.

Otro inquilino de la enfermería es José Manuel Irizo; al extremo sevillano se le ha realizado una resonancia en Sevilla y se está pendiente de conocer los resultados para saber si está disponible para Monteagudo este fin de semana; arrastra una pequeña distensión de una lesión antigua. Irizo no entrenó con normalidad durante la semana pasada pero sí salió en la segunda mitad ante el San Fernando sustituyendo a Quiles en el minuto 68.

El último inquilino es Iván González; el central, lesionado de larga duración, continúa con su proceso de recuperación y su regreso está previsto para finales de año.

Lo positivo es que jugadores como Alfonso, Gustavo, Carlos Martínez o Carlos Fernández trabajan con normalidad con el resto de compañeros, dejando atrás las molestias que le hicieron perderse algunos encuentros.

Monteagudo no podrá contar esta jornada con el centrocampista Sergio Jiménez, por sanción.