Recreativo

Un enfrentamiento de otra categoría

  • El Recre y el Murcia se miden en una Nueva Condomina que presentará una gran entrada en un choque con alicientes propios de otro nivel

El Tourmalet no da respiro. Sin tiempo casi para recuperar el aire tras la dura rampa inicial con el Cartagena aparece el Real Murcia. De todas las salidas que hay a lo largo de una temporada pocas reúnen tantos elementos para atraer y preocupar a partes iguales como la visita a la Nueva Condomina. Espera un choque de esos que hacen olvidar por momentos la realidad de la categoría.

Es un partido grande. Por entidad, respaldo social e historia se miden los dos más grandes del grupo IV sólo comparables en toda la Segunda B como equipos como el Racing de Santander, el Hércules o el nuevo Castellón. No serán pocos los partidos de la Liga 123 que presenten una asistencia menor o que susciten menos interés que el duelo que medirá al Recre con el Real Murcia. Los dos lo valen.

El Recre espera un rival que lleve la iniciativa y se prepara para contrarrestarlo

Atrapados en un pozo que no les corresponde y asfixiados por una deuda importante, los paralelismos institucionales que puedan presentar uno y otro conjunto terminan del verde para adentro. Si fuera ambos saben que la supervivencia pasa por el retorno temprano a la LFP y se ven atrapados entre su realidad y sus urgencias, sobre el césped los modelos son la noche y el día.

El Murcia espera con un equipo caro, muy caro. Junto al Cartagena es el conjunto que más ha invertido con fichajes fuera de mercado como los de Alfaro, Aquino, Manel, Mackay, Chumbi o Hugo Álvarez. Parte como un objetivo claro de pelear por ser primero, ni siquiera la promoción de ascenso es una meta porque la da por segura. Quiere ser primero sí o sí a los mandos de Manolo Herrero. Contrasta con la política de contención y mucho trabajo aplicada en Huelva. Son dos fórmulas muy diferentes. De la mesura albiazul para rentabilizar los recursos a la locura económica murcianista. Y hoy se miden por primera vez desde el retorno albiazul a Segunda B en unas posiciones clasificatorias mucho más acordes a lo que ambos significan. Además, el rendimiento de los dos contendientes es bastante parejo con sólo un gol recibido por los locales y ninguno en el caso albiazul y los mismos logrados. A favor del Recre debe jugar también el desgaste de la Copa del Rey, ya que su oponente tuvo una dura eliminatoria el miércoles contra el Ebro que se resolvió en la prórroga después de 120 minutos de empate a cero.

Salmerón conoce bien la plaza. Hace unos meses salió de ella hastiado por los problemas institucionales. Sabe de las fortalezas y las debilidades del oponente de esta tarde. Precisamente un hombre que se trajo de su etapa pimentonera es la principal duda del choque. Carlos Martínez viaja con el Recre hasta Murcia, si bien sus opciones de salir de inicio serán escasas. Lleva 10 días en el dique seco por lo que se convierte más en un recurso en el banquillo que una alternativa real de inicio. Sin Iago Díaz por lesión se abren varias opciones a Salmerón. Puede fortalecer el centro del campo para ser más sólido y que Caye alterne o la banda o bien colocar de inicio a Víctor Barroso y que la estructura del equipo sea similar a las de las tres primeras jornadas. En ese caso los cambios serían mínimos.

Con un dibujo u otro las sensaciones previas invitan a pensar de nuevo en un partido cerrado, de pocos espacios y mucho respeto entre dos equipos que saben del potencial del adversario. No es mal escenario para el Decano, que en las tres primeras jornadas sacó petróleo de lo que parece que será una tónica habitual. El Recre sabe que su consistencia le hace ceder muy poco y que con el potencial que tiene arriba puede aprovechar cualquier ocasión para hacer mucho daño. Su rival además lleva tres partidos sin marcar, por lo que vive una minicrisis ofensiva que tratará de soliviantar el Decano. Que el Murcia lleve la iniciativa forma parte de un guión que no incomodará a los de Salmerón, que esperarán su oportunidad para que el rival se descubra y asestar un golpe.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios