Era de esperar que el Estadio Nuevo Colombino se inundara de sentimiento recreativista. Un partido que se disputa en casa es lo que conlleva, que se unan cientos de almas al son de un mismo cántico, Decano de mi alma. El Recreativo puede presumir de afición, ya que ha hecho historia con el mayor número de socios de la quinta categoría del fútbol nacional.

En este último partido disputado ante el Rota, las restricciones que limitaban el aforo en los estadios habían remitido, por lo que el Colombino ha recibido en sus gradas a todo aquel que le corre por las venas el sentimiento albiazul. Durante los 90 minutos del encuentro no han cesado los cánticos ni los aplausos, más de 8.000 personas volcadas con un único objetivo, llevar al Decano al lugar que se merece y del que nunca debió salir.

Los domingos que juega el abuelo, la ciudad de Huelva lo sabe y se siente desde primera hora de la mañana en la que ya se empezaban a ver camisetas albiazules vestidas por los onubenses. Es un día de fiesta para sus aficionados, y más aún, cuando se vuelven a casa con la adrenalina y la alegría de haber conseguido los tres puntos. Son esas mariposas del estómago lo que provoca el Recreativo en la ciudad onubense.