El Belén Viviente de Beas abre su 55 edición con un marcado carácter inclusivo: "Se transforma cada año; quien piensa que ya lo ha visto, se equivoca”

El Belén Viviente de Beas inaugura su 55ª edición con un "éxito rotundo de asistencia y emoción entre el público". Esta edición mantiene la esencia que caracteriza al Belén: la combinación de escenas bíblicas y costumbristas. Entre las novedades, se han ampliado algunos pasajes religiosos, como la escena de los desposorios de la Virgen y San José y la inscripción del Niño. También se han incorporado nuevas recreaciones de la vida tradicional, que se renuevan cada año. “El Belén se transforma edición tras edición; quien piensa que ya lo ha visto, se equivoca”, destaca Antonio Rosillo, hermano mayor de la hermandad de los Clarines.

Un Belén con vocación inclusiva

El Belén Viviente de Beas es este año un espacio inclusivo, una apuesta que la hermandad considera "fundamental" en su trayectoria. Una de las escenas está representada por usuarios de la residencia Besaida, situada a pocos metros de las instalaciones, cuya participación el día de la inauguración fue recibida con gran emoción por parte del público.

Además, este año el recorrido incorporará pictogramas (que se instalarán en los próximos días) y materiales en braille para facilitar la experiencia a personas con discapacidad. Igualmente, Rosillo recalca el carácter accesible del nacimiento, recordando que "el recinto, como siempre, está pensado para que todo el mundo acceda, sin barreras arquitectónicas".

Un referente belenístico en España

El hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de los Clarines, encargada de la organización del Belén cada año, subraya el peso histórico y cultural del Belén de Beas, considerado "una de las siete maravillas de la provincia de Huelva", siendo uno de los belenes vivientes más antiguos del país: “Somos el segundo de España y el primero de Andalucía". A partir de este modelo han surgido otras propuestas similares, aunque recuerda que las instalaciones de Beas son completamente cubiertas, lo que las diferencia de otros montajes.

El Belén cuenta este año con unos 170 niños figurantes, divididos en dos grupos, y entre 90 y 95 adultos, contando con un recorrido de entre 35 y 37 escenas. Desde la hermandad reconocen que este año se ha comenzado con la preparación "algo más tarde de lo habitual debido al relevo reciente en la Junta, que tomó posesión el 5 de octubre. Aun así, las tareas de demolición, reconstrucción y transformación de espacios se han ejecutado en tiempo récord”.

Apertura al público y precios

El Belén estará abierto desde el 29 de noviembre hasta el 4 de enero. Se podrá visitar los sábados y domingos por la tarde, de 15:30 a 19:30; domingos por la mañana, de 11:00 a 13:00 y durante el puente del 6, 7 y 8 de diciembre, abrirá en horario de mañana y tarde debido a la gran afluencia: "se superan las 30.000 visitas en cada edición", asegura Rosillo.

Además, los precios se mantienen como en años anteriores, teniendo un precio "simbólico". Los adultos pagarán 6 euros; los niños de 4 a 11 años, 3 euros y los menores de 3 entran de manera gratuita.

Una invitación a vivir la Navidad

Rosillo destaca cómo cada año la magia del Belén conquista desde niños a mayores, sin importar la edad ni la procedencia. "Adultos y niños disfrutan siempre del recorrido: los mayores reconocen objetos en desuso que formaron parte de su vida cotidiana, mientras que los pequeños se sorprenden con los animales y la recreación de oficios y costumbres antiguas. Siempre es digno de visita".

Desde la hermandad invitan a descubrir este tradicional "pero siempre novedoso" nacimiento, que sigue cosechando éxitos, posicionándose como "un plan obligado" para las familias cada mes de diciembre: "Que no se pierdan este espectáculo navideño", invita el Hermano Mayor.