El proyecto Camino Natural del Río Tinto, que lleva a cabo la Diputación de Huela, ha sido elegida como Buena Práctica por el proyecto Eco-Cicle Interreg Europe, que trabaja en el desarrollo de una red europea para el fomento del cicloturismo.

La intervención en el Camino del Tinto fue elegida en la categoría de financiación, además del Itinerario paisajístico y de recualificación de bordes urbanos en el Estuario Norte del Odiel, a cargo de la Junta de Andalucía, ambas Buenas Prácticas presentadas por la Corporación provincial onubense.

El objetivo de la actuación en el Camino Natural del Río Tinto es transformar el antiguo trazado del ferrocarril minero en una ruta ciclable de 102,5 kilómetros junto al cauce a través de un paisaje de interés excepcional.

Sin embargo aún falta un largo tramo para completar el recorrido y alcanzar el fin, ya que hasta ahora tan solo se han transformado en una ruta ciclable y de senderismo 5,5 kilómetros, con un presupuesto de cerca de 400.000 euros, por lo que aún falta por realizar 97 kilómetros, o lo que es lo mismo el 95% del proyecto.

Las obras del primer tramo de la ruta, desde las estaciones de Los Frailes (en el término municipal de El Campillo) hasta la estación de Berrocal (término municipal de Zalamea la Real), concluyeron en marzo del año pasado. Desde entonces el proyecto está paralizado.

Aún falta por realizar 97 kilómetros, o lo que es lo mismo el 95% del proyecto

Los trabajos se desarrollaron a través de tres subproyectos o fases, comenzando por la fase de rehabilitación y conforme fueron avanzando las obras se iniciaron las del segundo proyecto o fase de señalización.

El recorrido completo discurre por los términos municipales de Nerva, Minas de Riotinto, El Campillo, Zalamea la Real, Berrocal, Paterna del Campo, Niebla, La Palma del Condado, Villarrasa, San Juan del Puerto, Trigueros, Moguer, Palos de la Frontera y Huelva. El origen del trazado se ubica en La Peña del Hierro, en Nerva, y su finalización es el Muelle de la Riotinto Company Limited en Huelva.

La Diputación onubense contó con el apoyo financiero de la Junta de Andalucía para convertir la vía férrea en una ruta cicloturista. Con el cambio de Gobierno regional, la institución provincial buscar conseguir más financiación, ya que se requiere inicialmente una inversión aproximada de 10 millones de euros para los tramos más complejos.

Y es que la relevancia de los elementos patrimoniales ferroviarios potencialmente afectados requiere niveles de financiación superiores al promedio. El desafío técnico está relacionado con la dificultad de financiación, lo que requiere la participación diferentes organismos públicos desde el nivel local al nacional, según la Diputación.

Eco-Cicle Interreg Europe lo designa como Buena Práctica

La singularidad del paisaje, relacionada con la industria minera abandonada, es un valor agregado para el turismo. La actuación en el Camino del Tinto es un buen ejemplo de una intervención en áreas degradadas debido a la actividad minera que tuvo lugar a través de los siglos y que en la actualidad, después de su desaparición, sufre despoblación y desempleo, a pesar del rico patrimonio histórico vinculado a esas actividades de la industria pesada. Sin embargo, el proyecto está lejos de ser acabado.

El proyecto Eco-Cicle tiene como objetivo el desarrollo de una red europea para el fomento del cicloturismo en espacios naturales, mejorando las políticas locales y regionales relacionadas con esta actividad. Impulsando el uso de la bicicleta, más allá de las ciudades, para la promoción y protección del patrimonio natural y cultural.

La Diputación de Huelva es socio líder de este proyecto, en el que participan además organismos públicos de Polonia, Alemania, Eslovenia, Italia, España (Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Junta de Andalucía), así como la EuropeanCyclists Federation en funciones de socio asesor.