El Ayuntamiento de Huelva recibe tres solicitudes para los puestos de la galería comercial de La Merced. Así lo manifiestan desde la administración local, donde indican que se están valorando las propuestas presentadas para posteriormente pasar el informe a contratación.

El Consistorio sacó a licitación la concesión de siete puestos en esta galería comercial con el objetivo de relanzar el comercio minorista en esta parte de la ciudad así como promocionar estas instalaciones que abrieron sus puertas en 1997.

La galería comercial de La Merced vino a sustituir al tradicional mercado de abastos, un emblemático edificio que presentaba un gran deterioro, y que desde la construcción de las nuevas instalaciones está sumido en un total abandono hasta el punto que el pasado año hubo que apuntalar la fachada. La edificación inaugurada en 1952 no se incluye en el Catálogo de Edificios Protegidos de Huelva pero se va a conservar su fachada principal.

La galería, situada enfrente del anterior mercado de La Merced, conserva la esencia del comercio tradicional, basada en la venta de productos frescos. Desde el Ayuntamiento se le quiere poner en valor como alternativa de empleo, haciéndola más atractiva y dinamizándola con una oferta diversa.

Dos de los siete puestos licitados son para la venta de pescado y los cinco restantes estaban abiertos a cualquier tipo de negocio que pueda tener cabida en una galería comercial.

La administración local sacó a concurso las autorizaciones para el uso y ocupación de estos puestos, de momento durante tres años y medio, hasta enero de 2024, fecha en la que vence el contrato de arrendamiento entre el Consistorio y la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía. En caso de prórroga o renovación de dicho contrato, la autorización para la explotación de estos espacios se entenderá ampliada por el mismo periodo de tiempo.

El precio del contrato corresponde a la tasa mensual a pagar al Ayuntamiento por el adjudicatario, 79,78 euros.

El local que ocupa esta galería comercial es la planta baja de un edificio con una superficie construida de cuatrocientos noventa y cinco metros cuadrados. Tiene accesos por dos calles: avenida Cristóbal Colón y Paseo de las Palmeras.

Las instalaciones están divididas en once establecimientos individuales, dedicados a la venta de pescados, carnes y chacinas, frutas y verduras, comestibles, congelados... y un bar-cafetería. Asimismo, cuenta con unos servicios comunes: lavabos para los usuarios, un servicio para minusválidos y vestuarios para el personal.