La Hermandad Matriz de Nuestra Señora del Rocío de Almonte ha suspendido las peregrinaciones que se iniciaron el pasado mes septiembre con especiales medidas de seguridad frente al coronavirus.

Ahora, “ante el importante ascenso en los últimos días por la Covid-19 en nuestra comarca y toda Andalucía”, la junta de gobierno de la Hermandad Matriz, “por responsabilidad, en coherencia con la línea que hemos seguido desde el inicio de esta situación sanitaria y atendiendo a las recomendaciones de las autoridades competentes”, ha decidido “suspender temporalmente” el calendario de peregrinaciones extraordinarias.

Al mismo tiempo, la Hermandad Matriz señala que “si las circunstancias lo permiten, lo retomaremos próximamente; seguimos muy pendientes de la evolución de la pandemia y rezamos a la Santísima Virgen del Rocío por la pronta recuperación de los enfermos”.

Las peregrinaciones se iniciaron el pasado 13 de septiembre con la presencia de los rocieros de la hermandad de Los Palacios y Villafranca, así como la Castrense y Chiclana de la Frontera. Unas peregrinaciones a las que ya algunas hermandades no acudieron por la precaución ante las medidas de la Covid-19 implantadas en sus localidades respectivas.

Unas peregrinaciones que aun cuando permitía postrase con sus Simpecados ante la Blanca Paloma, se realizaban en la iglesia de la Asunción de Almonte con medidas especiales. Así se suprimió la presencia de los miembros de junta en el presbiterio como suele ser habitual. Mientras que cada comitiva se reducía en la iglesia a 25 personas por hermandad, para dejar espacio a los fieles en general ya que las medidas de seguridad solo permitían un aforo de 150 personas.

Al mismo tiempo se habían suspendidos las procesiones de entrada con los Simpecados por las calles del pueblo hasta la iglesia.