El río que une y estrecha lazos. El próximo sábado se celebra la XIX Regata Internacional de piragüismo Río Guadiana, una competición transfronteriza que se celebra entre la localidad portuguesa de Villa Real de San Antonio (vecina de Ayamonte) y el municipio onubense de Sanlúcar de Guadiana. En total la distancia a recorrer por los palistas es de 34 kilómetros (unas 18,5 millas náuticas).

La prueba fue presentada ayer en el transcurso de una rueda de prensa celebrada en el Centro Comercial Hipercor Huelva Costa Luz en la que intervinieron su director, Andrés Fuentes; el alcalde de Sanlúcar de Guadiana, José Manuel Ponce; el teniente de alcalde y concejal de Deportes de Ayamonte, Francisco Blázquez, y el gerente del Patronato Municipal de Deportes ayamontino, José Antonio Fernández Susino, que fue quien facilitó los datos técnicos sobre la regata.

La Asociación Naval del Guadiana y el Club Náutico Isla Canela son los organizadores de esta competición, que cuenta con la colaboración y el patrocinio de la Cámara de Villa Real de San Antonio y los ayuntamientos implicados.

Se espera una notable participación. Las inscripciones, por la parte española, ayer alcanzaban las 120 piraguas aunque esa cifra se incrementará con la presencia de los palistas portugueses. Hay diversas categorías: la de competición, que está dividida según las edades y el sexo de los participantes y que por segundo año cuenta con una clase cadete para los nacidos en los años 1996 y 1997, con un recorrido menor de 18 kilómetros cuya meta estará instalada en la Foz de Odeleite (Portugal). También hay una categoría de kayak de mar y otra de turismo.

Fernández Susino comentó que esta actividad persigue varios objetivos, alguno de ellos plenamente conseguidos, con componentes deportivos, turísticos y recreativos.

"En primer lugar la promoción de los deportes náuticos, especialmente el piragüismo, algo que en Ayamonte está consolidado", resaltó. También "dar a conocer la zona del bajo Guadiana", algo que se hace gracias a esta prueba y a otras competiciones deportivas. Por último, subrayó el componente social de la regata, pues antiguamente el Guadiana era una frontera entre dos países pero "las barreras ya están derribadas y ahora sirve para estrechar lazos de unión entre dos pueblos, vecinos y hermanos".

El gerente del PMD ayamontino subrayó que la prueba "es una de las más duras del calendario nacional, bastante más que el Descenso del Sella" y comentó que "esperamos que las condiciones sean buenas" para los deportistas, que se encontrarán con un coeficiente de marea del 0,92. El sábado la bajamar será a las 09:27 y la pleamar a las 15:39, con lo que los palistas tendrán la marea a su favor, algo que ayudará en su ascensión por el río. Ahora bien Fernández Susino advirtió que el viento soplará en contra. "Esperemos que no sea muy grande y no suponga mucho sacrificio para los participantes", deseó.

La salida de las piraguas de turismo será a las 11:30 (hora española); mientras que las de competición lo harán 30 minutos después. Una de las novedades de este año es que la meta se ubicará en la playa fluvial de Sanlúcar de Guadiana, donde se ofrecerá una comida a los competidores a las cuatro de la tarde.

Se repartirán trofeos para los mejores en las diversas categorías y una serie de premios especiales entre los que destacan una piragua K-1 para el primer club, una pala y un GPS. Todos los participantes recibirán una camiseta de recuerdo y entrarán en un sorteo de regalos.

José Manuel Ponce recordó que la regata ha cumplido su mayoría de edad y está plenamente consolidada, destacando la belleza del recorrido. Más tarde, lamentó que "Alcoutim -el municipio luso fronterizo con Sanlúcar de Guadiana- lamentablemente se está desvinculando de la regata y en esta edición lo hace totalmente, con lo que el esfuerzo económico de nuestro Ayuntamiento es el doble. Colaboraremos en la prueba mientras nuestras posibilidades económicas lo permitan", manifestó.

Francisco Blázquez, en su intervención, también resaltó que la prueba supone un nexo de unión entre los pueblos. "Las barreras que en tiempos nos separaron ya han caído y ahora el río es un camino que posibilita el contacto entre los ciudadanos".