El Isla Cristina continúa líder una semana más tras seguir con su pleno y sumar seis victorias en seis partidos. El cuadro costero tuvo que remontar a un Aracena que plantó batalla y obligó a la remontada.

El encuentro comenzó con dominio del conjunto local, con toques de balón buscando entrar en la parcela serrana, pero le era difícil pisar con peligro el área aracenense, merced a la firmeza de la defensa, que a veces acumulaba muchos efectivos. Por su parte, los pupilos de Cano no se mostraron demasiados defensivos y buscaron el contragolpe, tratando de sorprender a la retaguardia costera.

El Isla empezó a crear peligro poco a poco; sin embargo, el cronómetro corría y los pupilos de Francis Acosta no encontraban la fórmula para abrir el marcador. Todo intento resultaba estéril, con un dominio infructuoso, y casi sin ocasiones destacadas se llegó al descanso.

En la reanudación, nada más ponerse el balón en juego, llega una falta sacada por Calvo, el portero costero no se queda con el balón y Luis, atento, anota el 0-1, obligando al Isla a remontar y con el hándicap de que no llegaban ocasiones claras de gol. No obstante, la respuesta llegó en el 58, en un buen pase al hueco de Fernan sobre Sebas, quien bate al meta serrano en su salida (1-1). El gol fue acogido por mucha alegría por la hinchada local, que venía posible la remontada ya que quedaban muchos minutos por jugar y se apreciaba una mejoría en el juego. Los serranos no se conformaban con el empate y se lanzaron al contragolpe buscando sorprender a Enrique, mientras se defendían bien de las acometidas locales.

El líder sacó fruto de su dominio en el minuto 72, cuando se produce una falta fuera del área que lanzada por Ismael acaba en el fondo de las mallas y que colocaría el definitivo 2-1.

Los goles fueron lo mejor de un encuentro poco vistoso, pero sí emocionante, sin que el marcador se moviera en los minutos finales pese a que ambos equipos lo intentaron.

Tres puntos más para un Isla imparable, que el miércoles visitará el difícil feudo del Aroche.