lluvia

Hallan el cuerpo de una mujer en el cauce del río Seco

  • Sería la tercera víctima que se produce en las últimas inundaciones registradas en la provincia

Bomberos trabajando en unas inundaciones una imagen de archivo.

Bomberos trabajando en unas inundaciones una imagen de archivo.

El cuerpo sin vida de una mujer de unos 50 años fue hallado esta noche próximo al cauce del río Seco en Vélez-Málaga. El suceso ocurrió alrededor de las nueve del lunes, cuando según fuentes de Protección Civil, la mujer trataba de cruzarlo a pie junto a su marido en la zona próxima a la Hacienda Macarena, próxima al lugar en el que residían. Estas mismas fuentes informaron que fue el marido quien llamó al servicio de emergencias 112 tras perderla de vista.

Entonces se inició el dispositivo de búsqueda al que acudieron dos dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos, cuya base se encuentra muy cerca del lugar del suceso, Policía Local, Policía Nacional y efectivos del Servicio de Urgencias y Emergencias Sanitarias. A la media hora, encontraron el cuerpo sin vida de la mujer a dos kilómetros del lugar en el que había desaparecido, cerca de la finca La Pola junto al desvío de subida a Bentomiz Poco antes de las doce de la noche se produjo el levantamiento del cadáver.

Fuentes municipales no pudieron confirmar que la muerte de esta mujer se hubiese producido por la crecida del río provocada por las lluvias acumuladas a lo largo del río. A parecer, cuando trataron de cruzarlo a pie, el cauce llevaba bastante agua, aunque no llovía en esos momentos. El Cuerpo Nacional de Policía ha abierto una investigación para esclarecer las causas del suceso.

El cuerpo de la mujer se encontró junto al cauce a dos kilómetros de donde desapareció

Con esta, de confirmarse que su fallecimiento se debe a la riada, serían tres ya las víctimas mortales de las últimas inundaciones. El primer caso se remonta al pasado día 9 de octubre, cuando fue hallado el cadáver de un hombre flotando junto al espigón de Puente Romano, en Marbella.

Los primeros indicios apuntaban entonces a que la muerte se pudo producir por ahogamiento pero no fue hasta la semana pasada cuando, según informaron fuentes cercanas al caso, la investigación confirmó que el individuo fue arrastrado por el agua tras las intensas precipitaciones.

La segunda víctima, fue el bombero, José Gil, de 47 años, que fue encontrado muerto tras haber sido arrastrado por la corriente en Campillos, donde participaba en labores de apoyo en emergencias durante las inundaciones que asolaron el interior de la provincia de Málaga.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios