Aracena ha vivido un año más la Fiesta de la Cruz, un rito de siglos de historia y que es una de las tradiciones más antiguas de la localidad serrana. El momento protagonista tuvo lugar en la mañana de ayer, con la procesión del paso de la Santa Vera Cruz perteneciente a la hermandad que lleva su mismo nombre, Vera Cruz, y conocida popularmente en la localidad como la “del Castillo”.

La procesión por el entorno del cerro del Castillo, concretamente por el conocido como “carreterín”, tuvo lugar en una mañana agradable en cuanto a las temperaturas, aunque algo fresquita, como viene ocurriendo estos últimos días con una notable bajada del termómetro serrano.

La procesión duró sobre una hora y media y justo después tuvo lugar el momento más esperado, con el cambio de varas y toma de posesión de la nueva terna de mayordomo y diputados para coger el testigo de la terna saliente. Cada vez más mujeres se incorporan a estos cargos, no siendo ya noticia, según el orden de antigüedad de hermanos de la cofradía.

Tras la toma de posesión, que tuvo lugar como siempre bajo el atrio del Castillo y con el paso de la Cruz como testigo, se desarrolló la función religiosa. Una fiesta que comenzó con los miembros de la terna entrante desde por la mañana temprano por varias calles del municipio, con la visita al mayordomo incluída, y que duró hasta bien avanzado el mediodía.

La procesión conservó la afluencia habitual de público de los últimos años, es decir, bastante floja. Y es que se trata de una fiesta de siglos y de una de las hermandades más importantes de Aracena, pero a la que el público no acude de forma notable sin importar si hay, como ocurrió ayer con las comuniones, otros eventos de relevancia.

En la procesión, como es habitual, estuvo presente un tamborilero para amenizarla. También quedó patente el sonido de los clásicos –y polémicos en estos años– cohetes. Además de los nuevos diputados y mayordomo, el protagonista es el paso de la Vera Cruz, que fue portado por jóvenes costaleros y capataces (algo más de veinte chavales).

Como singularidad y tradición frente a la procesión del Jueves Santo, donde sale el mismo paso, ayer llevaba cuatro lazos de color rojo en cada esquina que portaron los cuatro nuevos diputados, tres hombres y una mujer, y la Cruz llevaba el clásico sudario rojo.

De igual forma, el sábado por la noche tuvo lugar, como inicio de la Fiesta de la Cruz en Aracena, el Rosario desde la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción hacia el Castillo.

Tanto el Rosario como en la procesión de ayer el cortejo estuvo presidido por el estandarte de la Cruz y por miembros de la junta de gobierno de dicha hermandad, además de representación civil en la mañana de ayer tanto en la procesión como en la misa.

Además el acto contó también con de la presencia incansable del cura párroco del pueblo Longinos Abengózar Muñoz.