El Martes Santo fue la primera jornada de esta Semana Santa, que sufrió con contundencia, la adversidad que supone la presencia de la lluvia y eso que las previsiones meteorológicas no hablaban de precipitaciones. La probabilidad de chubascos que marcaban los pronósticos oficiales era bastante baja.

Las cuatro cofradías de este día: La Sentencia, La Sagrada Lanzada, Estudiantes y Pasión actuaron con sensatez ante las malas circunstancias que surgieron y las tres últimas realizaron su estación de penitencia, cuando la tarde se asentó. Así, los pasos pudieron salir a la calle y Huelva respondió nuevamente con contundencia, con una gran presencia de público.

La peor parte de la jornada se la llevó la cofradía de Pérez Cubillas que tuvo que dejar para una tercera ocasión, la posibilidad de llegar a la carrera oficial. Era la primera en realizar su recorrido. Estos cofrades hicieron todo lo que estuvo en sus manos para que su titular pudiera alcanzar la Placeta, pero la meteorología no dio tregua. La ilusión que se palpaba en el interior de San Francisco de Asís, se mantendrá sin duda hasta el próximo año. Los cofrades de Pérez Cubillas así se lo merecen y serán recompensados.

Las otras tres hermandades tuvieron mejor suerte. Todas ellas se acogieron, como también hiciera La Sentencia, al protocolo de demora de una hora que ofrece el Consejo de Hermandades, para hacer la salida. De este modo, no hubo alteración en el desarrollo de los desfiles procesionales. Huelva respiró aliviada al ver que una jornada tan intensa como el Martes Santo no pasaba en blanco como en algunos momentos podía haberse temido.