La rodilla de Zamora dice basta. El central recreativista deja el fútbol por las lesiones. Terminará la presente temporada y en junio colgará las botas. Lo hace después de tres temporadas luchando contra las lesiones que se cebaron con sus rodillas y que no sólo le impiden competir con normalidad, sino que además ya afectan a su vida diaria. Zamora despidió afectado y emocionado en un acto en el que ha contado con la compañía del consejo de administración albiazul y de toda la plantilla del Decano.

El central, figura clave en la campaña de salvación del club el pasado verano, pone fin a su carrera profesional porque, a pesar de que tiene "muchísima fuerza y muchísima ilusión", físicamente no puede, ya que el dolor le impide "hasta alguna vez hacer una vida normal".

Se marcha agradecido y orgulloso "de haber defendido al club más antiguo de España"

Zamora dio las gracias a su familia, a sus compañeros, a todos los clubes por lo que ha pasado, a los trabajadores del Recre y a la afición del Decano por el trato recibido en las cinco temporadas vividas en Huelva. En su adiós se mostró "orgulloso de haber sido el capitán del club más antiguo de España". Lo deja porque "mis rodillas han dicho basta". Zamora aseguró que "donde vaya seré un recreativista más".

Zamora militó cinco temporadas en el Decano, en las que disputó 55 partidos, la mayor parte de ellos en las dos primeras campañas en Segunda División. En cambio en las tres últimas las lesiones lo han tenido prácticamente apartado de los terrenos de juego. En este tiempo su compromiso e implicación para salvar al Decano lo han convertido en un futbolista querido y respetado por todo el recreativismo. Zamora, formado en las categorías inferiores del Real Murcia y Real Madrid, defendió los escudos de equipos como el murciano, con el que debutó en Primera, además del Cartagena, Girona, Castellón, Ceuta y Badajoz hasta llegar a Huelva.

El zaguero se considera "un privilegiado por haber podido jugar en todas las categorías" y se va con el convencimiento de saber que es "el momento adecuado" porque siente que dio "todo lo que tenía dentro y fuera del campo". "Es muy duro abandonar algo que me hizo tan feliz y que tanto amé", dijo el murciano, quien aseguró que ni en sus "mejores sueños" pensó que dejaría el fútbol "en el lugar en el que empezó en España, en Huelva y en el Recre", club que a pesar de sus problemas siempre ve "más vivo que muerto".

Zamora se mostró agradecido a sus compañeros, empleados del club y consejo de administración, su familia y a la afición; y confesó que, "más allá de ser un mal o buen jugador" le gustaría ser recordado "por ser una buena persona" que, donde vaya, será siempre "un recreativista más".

El presidente de la entidad, Manolo Zambrano, quiso acompañar a Zamora en su adiós. El dirigente albiazul le dio las gracias en nombre de la entidad porque "desde que llegamos nada más que tenemos palabras de elogio". El Recre pierde "a un gran jugador, pero ganamos a una gran persona y el tiempo dirá", dejando abierta la posibilidad a su continuidad en el Decano en otras funciones.