La Corporación municipal celebra hoy a mediodía un pleno extraordinario para determinar si se aprueba la moción del grupo de Izquierda Unida de contratar sendas auditorias, una privada y otra pública, a fin de arrojar luz sobre la situación financiera en la que se encuentra las arcas municipales.

La inestabilidad política del gobierno en minoría en el que ejercen los socialistas, brinda la potestad de inclinar la balanza al PP, quien ayer lunes se reunía su comité local para sopesar la posibilidad de apoyar la contratación de la auditoría, toda vez que no se ha producido ninguna toma de contacto previa al Pleno con el resto de grupos políticos, todo ello a pesar de que el primer edil, Carlos Sánchez, anunciara su voluntad de lograr acuerdos puntuales con los populares tras los fracasos en las negociaciones con IU.

El portavoz de IU, Francisco Díaz, recalca que se han visto obligados a presentar esta moción ante el "ostracismo" que envuelve la economía municipal, agravada por los continuos "incumplimientos del alcalde de poner sobre la mesa las cuentas públicas". Tanto populares como izquierdistas consideran que estos datos se presumen de vital importancia para conocer el margen de maniobra que tiene la institución local a la hora de afrontar nuevas inversiones y, por ende, a la hora de elaborar unos presupuestos creíbles que afronten las deudas con los proveedores y entidades financieras.

Pero en la petición de la auditoría también subyace la creencia de que, "supuestamente", se han podido cometer irregularidades financieras, dado que IU ya ha denunciado públicamente sus sospechas de que ciertas subvenciones sirvieran para financiar los elevados gastos de personal que lastran la economía municipal.

Para hacer frente a esta auditoría privada, IU propone realizar una modificación de créditos por valor de 60.000 euros, amén de solicitar a la cámara de cuentas de la Junta de Andalucía, otra auditoría oficial que realice un estudio paralelo de las cuentas municipales. Dicha labor comprenderá el periodo de las dos últimas legislaturas hasta nuestros días; es decir desde el ejercicio 1999. Díaz, sostiene que han sido consecuentes y también se revisará "uno de los años en los que estuvimos al frente del gobierno", poder que fue a parar a manos del tripartito conformado por PSOE, PP y PA, después de que proliferara una moción de censura.

La oposición pretende sacar adelante, en este mismo pleno, una moción para constituir una Mesa de Contratación que evite que se sigan produciendo las "contrataciones a dedo" que viene realizando el grupo socialista. La Mesa estaría constituida por dos representantes de los tres grupos municipales.