17 de los más de 100 usuarios con los que cuenta la residencia geriátrica María de la Paz de Nerva se encuentran aislados y en periodo de cuarentena tras dar positivo en Covid-19. A excepción de una persona, que ha tenido que ser traslada al hospital comarcal de Minas de Riotinto, el resto de usuarios afectados se encuentran bien y permanecen en la residencia con los síntomas característicos de la enfermedad.

Desde la Dirección del centro sociosanitario aseguran que se está siguiendo en todo momento el protocolo sanitario, además de informar a los familiares de las personas afectadas sobre el estado de salud en el que se encuentran los residentes.

Desde que saltó el primer caso se están realizando test de antígenos prácticamente todos los días y en las próximas 24 horas se van a realizar pruebas de PCR, tanto a usuarios como a trabajadores, para ver la evolución que se sigue y mantener controlado el brote.

Según los últimos datos sobre Covid-19 publicados por el Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía, Nerva tiene una tasa de incidencia de 2.708,5 casos por cien mil habitantes con 140 positivos registrados en los últimos 14 días y 83 en la última semana. Por delante de la localidad minera, en la comarca, El Campillo y Zalamea la Real superan la incidencia de Nerva, aunque con menor número de casos.

Hace justamente un año, el 99% de los usuarios y trabajadores de la residencia geriátrica María de la Paz completaba su pauta de vacunación con la segunda dosis contra la Covid-19, que les ha permitido permanecer inmunes durante unos seis meses ante la enfermedad, si bien su efectividad no se garantizaba al 100%, y durante la última semana de noviembre de 2021 se suministró la dosis de recuerdo.

A mediado de septiembre de 2021, la Fundación Diagrama, que gestiona en Nerva el Centro Sociosanitario María de la Paz, y el Ayuntamiento de Nerva se reconocían mutuamente la colaboración, apoyo y dedicación prestadas por ambas entidades durante la pandemia de Covid-19, reconocimiento que desde la administración local hacían extensible a los profesionales de la residencia geriátrica por su implicación y esfuerzo en la atención y cuidados de las personas mayores residentes.

A pesar de todos los esfuerzos realizados para mantener a raya al nuevo coronavirus, la residencia nervense ha tenido que lamentar la pérdida por coronavirus de uno de sus más de 100 usuarios. El fatal desenlace se produjo el 1 de abril de 2020. Se trataba de una mujer de 87 años con pluripatologías previas. Días antes de este fallecimiento, nada más conocerse el positivo por COVID19, la Unidad Militar de Emergencia (UME) procedió el 24 de marzo a la desinfección de la residencia tras la petición realizada por el alcalde de Nerva, José Antonio Ayala. El 10 de abril de ese mismo año, usuarios y trabajadores de la residencia daban negativo en el test rápido de coronavirus realizado por las autoridades sanitarias.