Huelva vuelve a mirar a su ministra para dejarse ver desde el rincón más oriental de la península. Y para ello presenta una lista de peticiones que es imposible que no encabece el empleo. Cierto es que cuando Fátima Báñez llegó al Ministerio, en diciembre de 2011, la provincia tenía una tasa de paro del 32,37% y que ahora, cinco años después, se ha rebajado al 29,64%. Pero también es cierto que las listas de desempleados siguen prácticamente inamovibles: en octubre de 2011 (por hacer la comparativa anual) eran 58.201 los onubenses que había registrados como parados y ahora, según los datos publicados en jueves, ese registro se queda en 55.875.

Urge bajar esa cifra y para ello los empresarios miran a la industria, sin dejar de lado otros sectores básicos del tejido productivo de la provincia como el agroalimentario, el turismo o el comercio. Los sindicatos apuntan hacia la supresión de políticas de austeridad en beneficio de una mejora de la condiciones sociolaborales, con especial incidencia en la temporalidad que lleva a Huelva a la cabeza de España, con sólo un 2% de contratos fijos.

Esta legislatura debe ser la de los autónomos y de las pymes. Lo entiende así el presidente de la Federación Onubense de Empresarios (FOE), José Luis García-Palacios porque cree que tienen que ser objeto de prioridad por parte del Ministerio de Empleo, y así "poner en valor lo que representan, sobre todo en un territorio como el nuestro con una tasa de desempleo en niveles insostenibles".

García-Palacios confía en que se articulen las medidas necesarias para que la empresa se convierta en "el eje del nuevo Ejecutivo, especialmente en la cartera que ostenta Fátima Báñez, que igualmente debe atender a las reformas pendientes de acometer en el mercado laboral". Así se podría dar respuesta a las necesidades de mano de obra que reclaman para determinados picos de producción de la campaña agrícola.

Son muchos los asuntos pendientes en la provincia, pero la patronal centra su petición en el "compromiso firme, para que desde la lealtad y coordinación institucional", se haga una apuesta "decidida" por la reindustrialización, para generar confianza y hacer atractiva la provincia para atraer inversiones que vengan a recuperar los más de 15.00 empleos que se han perdido en el sector industrial y sus empresas anexas. Por ello, el presidente de los empresarios hace un llamamiento para desarrollar una estrategia definida "con el fin de conseguir un escenario que sea capaz de apoyar a un sector imprescindible de nuestra economía: la industria, en todas sus variantes".

También en la Cámara de Comercio esperan un compromiso firme con los sectores productivos básicos y que Báñez ayude a que se reactiven con la puesta en marcha de "iniciativas y proyectos que cambien el panorama actual en el que nos movemos".

Aunque hay asuntos que no son de su responsabilidad ministerial, el presidente de la Cámara, Antonio Ponce, entiende que hay aspectos de los que depende directamente el crecimiento de la economía provincial y por ello le pide a Báñez un compromiso con las infraestructuras. Destaca el aeropuerto, una iniciativa privada para la que reclama agilidad en su tramitación administrativa, y proyectos como el CEUS del Arenosillo o el Lince, el acelerador de gran densidad de iones con aplicaciones en la medicina y en la industria.

En la pasada legislatura el diálogo fue esencial y en ésta que acaba de comenzar se presume que aún lo será más. Los sindicatos lo saben y por ello demandan a la ministra una actitud negociadora para mejorar las condiciones sociolaborales de los onubenses.

Para el secretario general de UGT, Sebastián Donaire, es necesario romper con las políticas de austeridad, "que han supuesto un incremento alarmante de la pobreza y la desigualdad". Es hora de recuperar los derechos laborales y sociales perdidos y "apostar por un modelo de crecimiento que llegue a todos, y sea duradero y sostenible". UGT solicita para Huelva que el empleo de calidad sea el eje de las políticas económicas, un aumento salarial generalizado (en el sector público, privado y los perceptores del SMI), así como recuperar el equilibrio en las relaciones laborales y reforzar el sistema de protección social y los servicios públicos esenciales , además de una reforma fiscal integral "que sea progresiva, justa y persiga el fraude". Y para ello, entiende que hay que poner en marcha un plan de choque por el empleo, con medidas específicas para los colectivos con mayores dificultades, sin olvidar que se deroguen las reformas laborales de 2010 y 2012.

Más críticos se muestran desde CCOO con el nombramiento de Fátima Báñez, a quien ven como la "ejecutora de una letal reforma laboral que ha hecho añicos el Estatuto de los Trabajadores, ha arrinconado la negociación colectiva y ha elevado el paro a tasas insultantes", según el secretario general, Emilio Fernández. Le pide, por tanto, que en esta nueva etapa recuerde cuál es su tierra de origen y "exija inversiones públicas que mejoren las condiciones de vida de los onubenses".

Opinión bien diferente tiene CSI-F. Valora que Huelva vuelva a tener voz en el consejo de Ministros, aunque advierten de que estarán "vigilantes" con las políticas que se pongan en marcha, para que todas vayan encaminadas hacia la consecución de "empleo estable y de calidad", además de apostar por la diversificación de las fuentes de riqueza y generación de empleo. Para eso "es fundamental su compromiso con la provincia onubense, incentivando la inversión en colaboración con otros ministerios", según el presidente del sindicato, Juan Manuel Quilón, quien ve necesario además mayor respaldo a las pymes y autónomos, ya que "son la mayor parte del tejido productivo y su situación es muy deficiente en ayudas o desgravaciones".

Las peticiones son claras y ahora sólo queda que Báñez se sienta en la mesa y ponga sobre ella esa faceta dialogante que le ha servido para ganarse un puesto clave en la bancada azul.