“El miedo es el principal enemigo del consumo”. El inicio de las vacunaciones es para los comerciantes el “principio del fin”. “Que se normalicen los movimientos de las personas y el aforo. Que se quite el miedo”. Así explica a Huelva Información el presidente de Huelva Comercio, perteneciente a la Federación Onubense de Empresarios, Antonio Gemio, lo que supone la llegada de la vacuna contra el coronavirus para el sector. Sin duda, igual que para el resto de sectores, esta es una prioridad de cara a comenzar esa recuperación de la actividad económica.

Eso sí, el año que viene será un año de “transición para que en 2022 podamos tirar ya para adelante sin miedo a la Covid-19 y se pueda reactivar la economía”. La esperanza de Huelva Comercio es que para el ejercicio de 2022 se pueda recuperar el nivel que existía en el sector antes de que se iniciara la pandemia. Y es que durante el 2021, por lo menos hasta junio, habrá incertidumbre todavía con la vacuna, entienden desde Huelva Comercio. A partir creen que se podrán “hacer actividades en la calle y dinamizar”.

El principal reto del sector lo ligan a que cuando pase el verano “esté casi toda la gente vacunada. Que se pierda el miedo”. Además, entre los objetivos que se marca Antonio Gemio es seguir inculcando a los pequeños comerciantes la digitalización. “Tenemos que tener otro escaparate abierto que se llame internet”. A partir de ahí, la lucha del sector será con reivindicaciones “con las que llevamos más de quince años”. Otras que menos, aunque con un largo recorrido. Desde 2007 el pequeño comercio trabaja contra “la liberalización de las rebajas”. “No entendemos cómo se pueden tener 365 días al año en rebajas”.

Otra vía de trabajo es reducir el número de domingos en lo que se permite abrir durante el año. “Estamos diciendo que los domingos nos afectan muchísimo y cada año vamos a peor. Antes teníamos 5 domingos de apertura, después 8 y ahora vamos a 16 al año. Eso es una burrada para el pequeño comercio”, explica Antonio Gemio. Para el presidente de Huelva Comercio, todas estas cuestiones son piedras en una mochila que soportan y “cada vez pesa más, y cuidado porque cualquier día no vamos a poder con ella”. Además, fiscalmente “es muchísimo lo que pagamos de impuestos”.

El pequeño comercio se ha reinventado estos meses atrás. Hábitos que tienen muchas papeletas para que permanezcan. Por ejemplo, muchos comercios han instaurado los pedidos por WhatsApp. “Los pedidos telefónicos no existían y ya lo estamos haciendo, además de los escaparates virtuales”. “Ya estamos en la rampa de salida para reinventarnos un poquito más”, asegura Antonio Gemio.

Además, asegura el presidente que tanto en la Federación Onubense de Empresarios, como en Huelva Comercio y en la Cámara de Comercio “cada vez hay más cursos para que el comerciante se pueda adaptar a las nuevas tecnologías, que es muy importante”.

Por último, y a modo de balance, el presidente de Huelva Comercio no ha dudado en asegurar que 2020 ha sido el “peor año de la historia pero con muchísima diferencia”, superando así a la crisis de 2007-2008. Gemio remarca que la pandemia del coronavirus “ha arrasado con el comercio” y recuerda los cierres totales en marzo y abril. “Abrimos el 11 de mayo con un montón de restricciones que hemos mantenido todo el verano. Una película, un horror”. Las pérdidas del año se han ido hasta el “80%-85%” y achaca también que en la anterior crisis “no nos hacía tanto daño la venta por internet”, por lo que en mayor o menor medida la gente compraba en el comercio físico cuando necesitaba algo. Aun así, “nosotros siempre hemos dicho que de la crisis de 2007 nunca nos hemos recuperado”, y ahora hay que sumar la de 2020.