–Huelva lleva 30 años hablando de potencialidades turística, pero no despega. ¿Qué le falta?

–Huelva va en la buena dirección y me remito a los datos. Es la provincia que más ha crecido en turistas de toda Andalucía. Hasta hace poco era impensable. Se debe a esas potencialidades de las que hablamos, pero también a la amplia oferta que tiene Huelva porque hoy el turismo no es solo de sol y playa. Tenemos que ir hacia un turismo que rompa la estacionalización. Ahí los empresarios onubenses han hecho una apuesta importante que está dando resultados con un crecimiento del 10%. En este 2020 hablamos ya de un crecimiento por encima del 4,5%.

–Usted es de Sanlúcar de Barrameda. Tiene nuestra provincia a 800 metros, pero ha tardado dos horas y media en llegar a Huelva. ¿Es posible ese despegue sin romper con el aislamiento?

–Hay zonas de mi provincia que están a hora y media del aeropuerto de Jerez o no tienen tren como Tarifa, Vejer o Barbate y son referentes internacionales. El turista quiere llegar, pero también encontrar esa oferta diferente. El 78% de los turistas que vienen a Huelva se quedan con ganas de volver. Ese es el dato. Es verdad que la provincia tiene deficiencias, pero con la mejora de la red ferroviaria se puede lograr que Huelva sea un destino muy atractivo. Lo más importante es tener infraestructuras hoteleras de calidad.

–¿Cuál cree que debe ser el modelo turístico de Huelva?

–Al de calidad más que la cantidad poniendo en valor sus productos autóctonos. Hay referentes que están en el ADN onubense como es el sol, la temperatura, la gastronomía… Ahora debemos lograr que el producto sea sostenible e incrementar el gasto para generar empleo de calidad y riqueza.

–¿Por qué cree que existe esa sensación de freno con Doñana?

–Doñana nos pone en el mundo, es nuestro mejor embajador. Soy de Sanlúcar y también hemos tenido la sensación de que Doñana era un freno en el desarrollo, pero hoy no nos entenderíamos sin Doñana.