Huelva se erige, con un 6,25%, como la provincia andaluza -seguida de Almería- donde la rentabilidad media del alquiler es más elevada al cierre de 2019, según dicta el informe Solvia Market View. Del mismo modo, a nivel nacional la provincia onubense -que supera la media del país en 0,95 puntos- se mantiene en los primeros puestos en cuanto al citado parámetro se refiere, pues ocupa el quinto lugar, tan solo superada por Lleida (7,97%), Toledo (7,47%), Valencia (6,65%) y Lleida (6,61%).

Las zonas que contemplan un porcentaje superior de rentabilidad media son aquellas donde el precio del alquiler ha escalado en mayor medida que el de compra. Esto es habitual en el centro de las grandes ciudades españolas, en las localidades costeras o en aquellas zonas donde el precio de compraventa aún tiene un gran recorrido. Por ello, en tales ciudades todavía se pueden adquirir inmuebles a precios económicos y, por la localización de las mismas, el alquiler se presume como una opción ventajosa a la hora de obtener un rendimiento de una inversión. Por su parte, la provincia con menor rentabilidad del país es Barcelona, en tanto que, a pesar de ser una zonas con precios de alquiler muy elevados, también son altos los costes de compraventa y, por consiguiente, el desembolso inicial que tiene que afrontar el inversor en cuestión.

En relación con la demanda del alquiler, el ritmo de cierre de operaciones se mantiene en plazos muy positivos dentro del territorio nacional. El pasado año concluyó con medio millón de contratos firmados debido a que la demanda continúa en niveles muy elevados, pese a que el mercado no puede absorber mayores subidas en rentas. Según el informe publicado por Solvia sí que hay provincias en las que los precios todavía tienen recorrido, como Lleida (12%) o Huesca (11%). Por su parte, en Huelva las rentas contemplaron ligeros ajustes con valores negativos (-6%), al igual que Teruel (-5%) o León (-7%).

En estos momentos, en España la oferta residencial tanto en compra como en alquiler se sitúa en 3.173.300 inmuebles. De este montante el 20% representa el mercado del alquiler y el 80% se refiere al mercado de compraventa, centrando el mayor stock en las grandes provincias del país, véase Barcelona (15%), Madrid (11%), Alicante (8%), Valencia (8%) y Málaga (7%).

Solvia revela en su informe que España es un país de compradores, pues el 87% de la población nacional vive en esta modalidad. El motivo de que se cumpla este parámetro en la mayoría de los casos radica en los factores culturales y socialdemográficos que rodean al territorio español, en tanto que son estos los que impulsan a la población a tomar como preferencia la vivienda en propiedad en detrimento de la de alquiler. Esta constante en la mentalidad española también la atestigua el Índice de Confianza Inmobiliaria Solvia (ICIS), el cual refleja que más de 60% de la población recomienda la opción de vivir en propiedad frente al alquiler. A su vez, también han sido preguntados por ello los españoles que actualmente optan por la modalidad de alquiler, de los cuales un 72% asegura preferir la vivienda en propiedad.

En lo que a la tipología de vivienda se refiere, la demanda tiene como preferencia la obra nueva respecto a la de segunda mano. Sin embargo, es reseñable apuntar que la citada demanda está coartada por la escasez de oferta de viviendas de nueva construcción.

Por otro lado, Huelva es la provincia andaluza donde las operaciones inmobiliarias tardan más en cerrarse, en tanto que la media durante el cuarto trimestre de 2019 ascendió a ocho meses. Muy lejos quedan Sevilla o Málaga, con dos meses en cada una de media, Granada con tres o Cádiz, Córdoba y Almería, con una duración de cuatro meses. Por su parte, en Jaén la media se sitúa en siete meses.

Según los datos evidenciados por el informe de Solvia, Huelva supera a la media nacional en este parámetro, pues en España se necesitan unos seis meses para la venta o alquiler de una vivienda, siendo Madrid, Álava, Málaga y Barcelona, las provincias en las que se concretan con mayor celeridad las operaciones inmobiliarias, con una duración que oscila entre los dos y los tres meses. Por su parte, hay provincias como Orense, Cantabria o León donde la media alcanza el año.

En relación al comportamiento de los dos grandes núcleos en España, la ciudad de Madrid superó la mitad de las transacciones que se realizaron en la Comunidad con un 53%, por lo que queda evidenciada la gran liquidez que atesora, así como un plazo medio de venta de un inmueble que no alcanza los dos meses y medio. En contraste, Barcelona, con una media de cinco o seis meses, sí que muestra síntomas de agotamiento en el dinamismo de su mercado y liquidez.