Huelva

Detienen a un empresario por contratar a tres trabajadores ilegales en Huelva

Imagen de archivo de agentes de la Guardia Civil durante una detención

Imagen de archivo de agentes de la Guardia Civil durante una detención / M.G. (Huelva)

La Guardia Civil ha detenido en Belmez (Córdoba) a un empresario, de 50 años, por la contratación ilegal de cinco extranjeros en una finca de este término municipal y en otra de Huelva, donde los empleaba en condiciones de insalubridad y carentes de cualquier bien básico.

Según ha informado este sábado el instituto armado, el detenido se aprovechó de la situación de especial vulnerabilidad de estas personas, que procedían de países extracomunitarios y que se encontraban en España en situación irregular, para someterlos a largas jornadas de trabajo, sin contrato laboral, los siete días de la semana y con disponibilidad total.

Además, los lugares habilitados para pernoctar carecían de las mínimas condiciones de habitabilidad y salubridad. Las cinco personas contratadas, dos en Belmez y tres en Huelva, no tenían familiares ni amigos en España pero sí personas dependientes de ellos económicamente en sus países de procedencia, según la Guardia Civil.

La operación, desarrollada en el marco los servicios que el instituto viene realizando en la provincia de Córdoba contra la trata de seres humanos con fines laborales, comenzó en octubre pasado, al tenerse conocimiento a través de varias informaciones recibidas en el Puesto de la Guardia Civil de Belmez de la existencia de personas extranjeras en situación irregular en España empleadas en una finca del municipio.

Las primeras investigaciones permitieron localizar la finca y comprobar que en la misma se encontraban trabajando desde junio dos personas de nacionalidad extranjera, quienes, además de encontrarse en situación irregular, residían en la misma finca en unas condiciones de insalubridad y carentes de cualquier bien básico.

Posteriormente, se localizó una segunda finca en la provincia de Huelva, en la que el mismo empresario tenía a otras tres personas, también de nacionalidad extranjera en situación irregular en España, trabajando en las mismas condiciones de precariedad. Estas habían comenzado a trabajar en la finca ubicada en Belmez y fueron trasladadas a Huelva

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