En prácticamente su primera llegada con peligro ante la República Checa, Luis Suárez forzó un penalti gracias a una astuta internada. El portero Pavlenka sólo pudo detenerlo cometiendo falta con su pierna derecha. Que el charrúa estaba loco por el contacto, obvio.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios