Una importante publicación se ha producido en este último mes del año que sigue probando una afortunada incidencia en la aparición de libros surgidos en Huelva. Es en este caso La Guerra de Sucesión en la Provincia de Huelva, del que son autores los profesores Francisco García García y Antonio Manuel González Díaz, componentes del Grupo de Investigación de la Universidad de Huelva Mentalidad, sociedad y medioambiente en Andalucía e Iberoamérica en la Edad Moderna. Queda perfectamente clara la intención de esta importante y bien documentada edición desde el inicio de su introducción al abordar "el estudio de los acontecimientos militares que tuvieron lugar en la actual provincia de Huelva a lo largo de la Guerra de Sucesión tras la muerte del último de los Austrias, Carlos II, y, asimismo, también se interesa por las consecuencias que se derivaron para los onubenses del siglo XVIII de esta confrontación bélica internacional".

Efectivamente, la disputa sucesoria entre Felipe de Anjou y el archiduque Carlos tendría para la provincia de Huelva y las del Algarbe y Alentejo lusitanos una especial emergencia como zonas de vanguardia bélica. De esta manera, la situación en nuestro territorio y en particular en Ayamonte y El Condado, relacionadas directamente con el conflicto como las conexiones con el resto de Andalucía y sus vicisitudes estratégicas, están narradas con una clarividente y detallada exposición de los acontecimientos y un minucioso relato, ameno e instructivo, de la actividad bélica especialmente en los años comprendidos entre 1700 y 1710, a partir del cual la conflagración fue alejándose de esta zona sur.

Acertadamente se inicia el libro analizando los precedentes del conflicto que establecen este territorio provincial en la Edad Moderna como "escenario de operaciones militares, enmarcadas en contextos más generales de contiendas nacionales e internacionales". Ya la Guerra de Restauración de Portugal repercutió en nuestra provincia de forma "particularmente virulenta en toda la franja territorial situada al oeste de la provincia desde Encinasola hasta Ayamonte". En 1703 se agudizaban esas rivalidades que si no registraron la envergadura de grandes batallas, sí provocaron enfrentamientos de considerable turgencia durante más de una década.

Estas pugnas, no siempre referidas a sucesos bélicos, sino también a litigios fronterizos, apresamientos, cobros y liquidaciones de determinados derechos y alcabalas, así como "la actitud de las autoridades portuguesas en el desarrollo de ciertos conflictos", configuran, junto a la gran conflagración en sí, toda una amplia y completa relación de acontecimientos bélicos, no sólo referidos a la misma sino también a las actitudes civiles, a la intendencia y fortificaciones con grabados, ilustraciones diversas, mapas, gráficos y planos. No olvidan los autores las consecuencias de una guerra que supuso también "un fuerte descenso demográfico en las poblaciones", el rechazo de éstas a la actividad militar y las repercusiones económicas y sociales. Por el contrario se favorecieron la arquitectura militar y las defensas fronterizas del territorio. En definitiva, un libro muy interesante.