Provincia

El Pleno pide la conexión de Almonte y Sanlúcar con autobuses todoterreno

  • Emplazamiento unánime a las administraciones para que autoricen el transporte público por el litoral de Doñana · El servicio diseñado por el equipo de gobierno estaría dirigido a cubrir la demanda turística.

Ha sido siempre poco menos que una quimera, si bien en todo este tiempo Almonte no ha cejado en su empeño de comunicar, bien vía terrestre o marítima, dos pueblos hermanos separados por un milagro de la naturaleza llamado Doñana.

De momento, en principio, este sueño está más cerca de cumplirse de prosperar la iniciativa local para que las administraciones competentes autoricen el transporte público y terrestre por el litoral de Doñana. La propuesta, debatida ayer en Pleno, partió del equipo de gobierno y fue defendida por el concejal de Turismo, Domingo Núñez, quien enumeró las bondades de un proyecto que permitirá comunicar ambos municipios a través de un entorno único en el mundo, además de contribuir a reducir el número de vehículos que habitualmente circulan por él. Dicha conexión se realizaría en paralelo al litoral mediante un vehículo todo terreno de fisonomía similar al que realiza los recorridos turísticos por el Parque.

El PP respaldó la medida sin fisuras, no sin antes matizar que la propuesta se circunscribe al ámbito turístico y que nunca podría ser interpretado como un avance en materia de comunicaciones. De este modo, Domínguez mostró que no renunciarán a seguir reivindicando la unión Huelva-Cádiz por carretera y por su trazado norte.

El alcalde, Francisco Bella, tomó baza en el debate pidiendo el apoyo del resto de fuerzas políticas y enumerando las dificultades para nutrir de visitantes las 4.000 plazas hoteleras de Matalascañas. El aeropuerto de Sevilla es caro y lastra la llegada de visitantes, mientras que el de Faro queda lejano al obligar a realizar un tránsfer de cuatro horas. Por el contrario, de prosperar el proyecto se abre la posibilidad de que los turistas desembarquen en Jerez, más aun "vendiéndoles la idea de hacer el trayecto a través de toda la costa".

Mayor controversia tuvo la modificación de las ordenanzas fiscales para el 2010, que encontró una férrea oposición del resto de grupos. Los socialistas no ocultaron en ningún momento el revés sufrido en el presente ejercicio, cuyas previsiones de ingresos no llegarán a materializarse "por los efectos de la crisis".

El concejal de Hacienda, Manuel Vázquez, defendió la subida como un medio de seguir manteniendo los ingresos y "garantizar, a la misma vez, los servicios municipales". El edil defendió que los impuestos del IBI Urbana o Rústica se mantienen inalterados, así como el impuesto de circulación. Eso sí, los residuos sólidos en Matalascañas aumentarán "cinco euros por recibo, para tratar de contrarrestar los problemas de recogida". Igualmente se prevé una rebaja del 30% en la licencias de obras al objeto de dinamizar la construcción.

Recapitulando, los impuestos sufrirán meramente una subida del 1,3%, que se corresponderá con "el IPC previsto para el ejercicio 2010". Fue desde este frente donde arreciaron las críticas. Fernando Bejarano, portavoz de IU, ironizó sobre la posibilidad de que se hagan realidad las ensoñaciones sobre el IPC, máxime después del desplome sufrido en el 2009, cuando el equipo de Gobierno previó un aumento del 5%. Por otra parte, criticó que "las empresas del ladrillo se beneficien de una rebaja del 30% en el impuesto de obras mientras que los agricultores verán aumentados en un 100% sus impuestos por la explotación de la tierra".

El PP en boca de su portavoz, José Antonio Domínguez, señaló que en la lectura de los socialistas se obvian datos relevantes para interpretar una subida de impuesto que van más allá del 1,3%. Al respecto, recordó que "suben las tasas de depuración de luz, el uso de terrenos agrícolas y un largo etcétera más allá de la cifra anunciada". De igual modo, recordó que el impuesto de circulación ya ha tocado su techo impositivo "siendo el más caro de España y por suerte tiene un tope, porque si no también lo subiríais".

En la réplica Vázquez señaló que la realidad económica que impera en el país obliga a ceñirse a "dos modelos: subir los impuestos o despedir gente, como se hace en otros municipios. Nosotros tenemos 1.000 puestos de trabajo que directa o indirectamente trabajan para el Ayuntamiento y nuestra respuesta ha sido hacer a 160 trabajadores indefinidos".

Bejarano tachó de demagogia este recurso recordando que el pasado año a la plantilla se les subió el sueldo un 2% y los impuestos lo hicieron con las previsiones de un 5%.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios