El Ayuntamiento de Almonte no va a recurrir la sentencia del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo 3 de Huelva por la que el magistrado deja sin efecto la protección de la que gozaba Francisca Borrero, inspectora al frente de la Jefatura de la Policía Local del municipio, al desactivar la forma de provisión del puesto, que se limitaba al acceso al cargo "por promoción interna" en vez de ampliarlo, como dice la ley, a la externa siempre que el sustituto de Borrero cumpla los requisitos.

Así lo confirmó ayer a Huelva Información el concejal de Seguridad Ciudadana, Manuel Ángel Fernández, quien señaló que "esa ha sido nuestra decisión después de analizarlo con nuestros asesores jurídicos; no lo consideramos oportuno y acatamos la sentencia".

Preguntado por si van a impulsar el cese de Borrero, teniendo en cuenta que el de jefe de la Policía es un cargo de confianza que debe ser designado por la alcaldesa, Rocío del Mar Castellano, el edil indica que "en principio, ahora mismo el jefe de la Policía tiene que ser de igual o de mayor rango que ella y ella es la única inspectora que tenemos en el cuerpo".

En caso de que se busque un nuevo jefe "si el Ayuntamiento lo estima oportuno", recalca, "hay un proceso mediante comisión de servicio para traer una persona del mismo rango o superior". A Borrero, según Fernández, "no se le va a cesar, sino que deja de ser automáticamente jefe". Pero no perdería su rango de inspectora ni, obviamente, su condición de funcionaria de la plantilla municipal.

La investigación interna abierta a la todavía jefa policial por el hallazgo del cuchillo en la alcantarilla del callejón de los Granados y su tratamiento posterior impulsó ayer a Aníbal Domínguez, hermano y tío de las víctimas del doble crimen de Almonte, a pronunciarse. "Hay una necesidad imperiosa de apartarla debido al dilema sobre la aparición de esta mujer en el lugar del hallazgo y de la notoria irregularidad en la gestión", puesto que a la familia de Miguel Ángel y María le sorprende "que no se registrara en un parte de servicios dicha diligencia y que ella, como jefa de la Policía, no supiera nada".

Domínguez recordó que Francisca Borrero, entre otras cosas, participó en la vista oral del caso "como testigo de la defensa para contradecir la versión de la UCO".

Esto, a su juicio, "arroja muchas dudas sobre la legitimidad de esta mujer para continuar en dicho cargo, por lo que nos planteamos si no debiera incluso ser apartada de manera cautelar mientras se dilucida dicho expediente". Con todo, "esperamos que los responsables municipales asuman su compromiso con estas familias y aparten a esta mujer del puesto".

En paralelo, Manuel Ángel Fernández desmiente que el domingo se burlara de los policías que se concentraron frente a la casa consistorial, a los que reitera su apoyo: "Sus reivindicaciones son justas y estamos en proceso de valoración de sus puestos, hemos hecho una oferta económica pese a que no tenemos todavía ni presupuesto", apunta. Asimismo, recuerda que se han convocado 12 nuevas plazas policiales y que su pretensión es que el año que viene se creen otras tantas.