Visiones desde el Sur

Trincheras

España está llena de trincheras con idearios dispuestos a imponerlos por cojones al resto

España está llena de trincheras. En ellas andan pertrechados unos y otros, cada cual, con un ideario en mano dispuesto a imponerlo por cojones al resto de los mortales que vivimos en este lugar que nos acoge, que nos vio nacer y que sentimos como nuestro, al igual que todos los extranjeros que en ella trabajan, cotizan y la levantan día a día con su esfuerzo.

Ninguno de los agazapados está dispuesto a levantar un pañuelo blanco, siquiera por saber si por alguna razón que se les escapa a sus cuadriculadas y partidistas entendederas, en medio de la distancia que separa una barricada de las otras, pudiera existir un espacio neutro, una zona de diálogo que hiciera posible otra forma de hacer política, es decir, de mejorar la convivencia y el bienestar de la ciudadanía haciendo de España un lugar más amable, más cosmopolita, en donde todo el mundo tiene cabida y además es inevitable.

Porque los inmigrantes son necesarios, pregúntenles a los empresarios. Porque hay asuntos de Estado, en los que la unidad de España debe estar por encima de las aberrantes y vergonzosas posiciones que esgrimen.

España está gobernada por una coalición de izquierda porque así lo han decidido quienes pueden hacerlo, o sea, los votantes, la ciudadanía.

Miren ustedes, señores Casado, Abascal y Arrimadas, es comprensible que sus señorías quieran lastrar al gobierno con el objetivo de conseguir una mayor presencia en las instituciones. Lo admito. Pero ¿negar a España en las cuestiones de Estado? ¿Marear la perdiz con fariseas mentiras en las instituciones europeas e internacionales?

España no les pertenece. España es de los españoles y de las personas que en ella residimos y nosotros decidimos quiénes son los que dirigen nuestro destino. Y por muchas banderitas de España que se pongan en las muñecas, en las mascarillas, en las solapas de las chaquetas o en los balcones de sus casas, España es tan mía como de ustedes.

¿Cómo entender sus comportamientos cuando desbarran sobre la ilegalidad cometida en Ceuta por Marruecos? ¿Cómo el nulo apoyo en la crisis sanitaria? ¿Cómo la estulticia de las palabras dichas ante la salida de Afganistán de la coalición internacional? Miren: ustedes no parecen españoles, más bien una panda de inútiles, empezando por el Sr. Casado que se va a cargar a un partido de Estado, al PP, tan necesario, verdad, a mi entender, por muchas banderitas que se tatúen incluso en el pecho si les da la gana.

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