La mujer fatal por excelencia

Margaretha Geertruida Zelle (Leeuwarden, Países Bajos; 7 de agosto de 1876-Vincennes, Francia; 15 de octubre de 1917), más conocida como Mata Hari, fue una bailarina, cortesana y espía neerlandesa. Con las danzas brahmánicas y orientales triunfó en Europa. Durante la Primera Guerra Mundial, realizó labores de espionaje a favor de Alemania, por lo que fue detenida por las fuerzas francesas. Margaretha Geertruida Zelle murió ejecutada por fusilamiento en la fortaleza de Vincennes, acusada de espionaje y tras un juicio con pruebas amañadas por el contraespionaje alemán. La palabra matahari proviene del idioma malayo y significa Ojo del Día.

El cómic Mata Hari se publicó originariamente en los números 49 al 54 de la revista Tótem el Comix publicados entre octubre de 1990 y marzo de 1991. Es decir, en la segunda etapa de la revista Tótem, en la que fue editada por Josep Toutain. El cómic Mata Hari retrata a la perfección a Margaretha, y, de paso, denuncia prejuicios sociales y de género, además de estar dibujado de una manera sublime.

En el año 2019, la editorial Isla de Nabumbu rescata esta joya del cómic en tapa dura, en un álbum con Andreu Martín dándolo todo (novelista, guionista de cómic y cine español, especializado en novela negra y novela infantil y juvenil) y Marika Vila (prolífica ilustradora, historietista, dibujante, coordinadora editorial, y articulista). Además, esta edición incluye dos relatos cortos con guion de Felipe Hernández Cava, titulados Devil-idad y Circe, publicados en el 37 y el 40 de la revista Tótem correspondientes a octubre de 1989 y enero de 1990 respectivamente.

Son pocos los nombres femeninos que destacaron en la Historieta española de principios de los años noventa, pero sin duda uno de los más importantes fue el de Marika Vila, una pionera que abrió camino a la mujer en este sector. El volumen abre con un prólogo de la propia Marika Vila exponiendo como fue descubrir, buscar el coraje y mostrar el trabajo de esas mujeres tan valientes como la famosa espía. Andreu Martín también aporta su visión de los hechos con otra introducción donde reconoce que cuando Marika Vila le propuso la historia para que él la guionizara, él no tenía ni idea de quién era Mata Hari, pero un año después se había convertido en coleccionista de libros sobre la espía. Mata Hari es una obra muy representativa de una época del cómic español que se disfruta con toda su fuerza en la actualidad.

La trama de este cómic transcurre en Madrid, durante la Primera Guerra Mundial. En los clubes nocturnos se desarrolla un peligroso baile de intereses políticos y militares al amparo de la condición de Estado neutral de España. En una de estas salas de fiestas actúa una famosa bailarina y coreógrafa conocida por su nombre artístico de Mata Hari, quien actuó en escenarios de Berlín, París y otras capitales europeas. Estuvo casada y tuvo dos hijos, uno de los cuales murió envenenado por venganza hacia su padre. Vivió unos años en Java de donde tomó gran parte de su estilo artístico. Se divorció y empezó una carrera como bailarina de coreografías exóticas y eróticas. Tuvo numerosas relaciones con funcionarios y militares lo que le granjeó una fama de libertina y fundamentó la acusación de espionaje una vez empezó la Primera Guerra Mundial.

La visión que nos ofrecen Martín y Vila de este personaje histórico se centra en su condición de mujer libre e independiente y en la incomprensión que esta actitud le ocasiona durante su vida. Una animadversión que la persigue en un mundo gobernado por hombres violentos e intolerantes.

Sobresale en la realización gráfica de esta obra el uso del color. Marika utiliza una paleta llena de tonos brillantes, donde predominan los rojos, los naranjas y amarillos violentos que compensa con verdes, violetas y azules más apagados. Solamente quedan en blanco las generosas porciones de piel que podemos admirar de la protagonista, resaltando la desnudez de la stripper y bailarina holandesa.

El acertado enfoque argumental de Andreu Martín y la extraordinaria calidad de su realización gráfica a cargo de Marika Vila, acaban convirtiendo esta obra en un deleite para los sentidos.

La próxima semana: El combate de los jefes (1966), de René Goscinny y Albert Uderzo, séptimo álbum de Astérix el Galo, que es una parodia de los franceses colaboracionistas con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.