Primer intento fallido. El Miura 1 se quedó ayer en la rampa de lanzamiento y tendrá que esperar a otra ocasión para hacer su primer vuelo de prueba desde la costa de Mazagón. Los fuertes vientos en la mañana de ayer en este punto del litoral onubense obligaron a cancelar la misión de la empresa PLD Space, que prueba el primer cohete de desarrollo y fabricación totalmente español en las instalaciones del INTA en Huelva. El nuevo intento se producirá en la primera quincena del mes de junio que hoy se estrena, aunque no antes de una semana.

Anunciado el vuelo de prueba del Miura 1 para las 6:30, apenas unas horas antes, la expectación era muy grande a la espera del éxito de la importante misión para la ciencia en España. Primero las condiciones adversas de viento obligaron a retrasar una hora y media el lanzamiento, hasta las 8:00. Muy poco después de fijar esa nueva hora intervino otro imprevisto con la carga del propolente del cohete.

“Analizando un comportamiento anómalo en el reservorio principal de LOX de la plataforma de lanzamiento. El proceso está siendo anormalmente lento. La cuenta atrás esta parada”, informaba Raúl Torres, CEO de PLD Space, a través de Twitter. Solventada esta anomalía durante el proceso de carga, volvió a reanudarse el proceso a las 7:45 con una nueva hora de lanzamiento fijada a las 8:30.

Pero sólo cinco minutos antes del fin de la cuenta atrás, otra vez las condiciones meteorológicas adversas obligaron a suspender la misión, ya de modo definitivo. Torres lo explicaba de nuevo en las redes sociales: “Hemos estado toda la noche monitorizando los vientos en altura, con valores superiores a 20m/s y rachas de hasta 30m/s entre los km 8 y 12. La prudencia nos pide no avanzar”.

El Ministerio de Defensa había autorizado para este miércoles una ventana de lanzamiento entre las 6:00 y las 10:00, pero la persistencia de vientos con una fuerza superior a la admitida para un vuelo de estas características obligó a los ingenieros de PLD Space a descartar la misión en esta ocasión.

Esta de ayer fue la primera misión que ha sido abortada por la empresa española en las instalaciones del INTA en plena cuenta atrás, aunque ya días atrás tuvo que suspenderse también por la adversa meteorología. Todo estaba dispuesto el pasado domingo 21 de mayo, con los permisos de Defensa y toda la infraestructura del Centro de Ensayos de El Arenosillo (Cedea) del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial, pero en ese momento fue la lluvia la que impidió el lanzamiento.

Ahora los responsables de la empresa española trabajan en el desarrollo de la misión cancelada en una nueva ventana de días, que no llegará antes de una semana pero sí se espera que pueda ser en la primera mitad del mes de junio. En ello será fundamental que las previsiones meteorológicas acompañen, sin lluvia ni viento en altura, como ha ocurrido en los dos últimos intentos.

Cuando se decida el nuevo día de lanzamiento, todo el dispositivo de seguridad se activará de nuevo, con el INTA en El Arenosillo al frente y el Ministerio de Defensa, con el cierre a la navegación aérea y marítima en buena parte del Golfo de Cádiz. El vuelo de prueba llevará al cohete Miura 1 a ascender 150 kilómetros para después caer al mar. Ayer estaban preparadas la embarcación Libertad 6 para la recuperación, y Nervio, para apoyo a la misión.