El mejor ambiente está en El Rocío
Convivencia. El buen ambiente, la unión y la hermandad entre romeros son unas de las caraceterísticas por la que la romería del Rocío es aún más especial



La romería está su punto álgido y eso se nota en el ambiente. Lo que hace unos días era una aldea casi vacía, hoy es el lugar más concurrido de toda la provincia de Huelva.
Miles de personas de distintos lugares del mundo se han acercado un año más a la aldea almonteña para poder disfrutar de la compañía y cercanía de la Virgen del Rocío.
Los cohetes, los tambores, las flautas y el cante por sevillanas indican que ya se disfruta plenamente del Rocío, que viene cargado de nuevas experiencias y emociones.
La devoción se hace notar en todos los rincones de la aldea almonteña. Los niños corretean por las arenas con los tamboriles a cuestas, los jinetes llevan a sus caballos a ver a la Virgen y las mujeres ya visten sus mejores trajes de flamenca.
Se escuchan sevillanas y palmas por doquier y gritos de '¡viva la Virgen del Rocío!' que inundan la aldea casi cada minuto. Conforme avanza la mañana, el sonido del tamboril dando el toque de queda hace que los peregrinos salgan de sus habitaciones para inundar las arenas de la aldea almonteña. Las casas particulares, las peñas y las casas de hermandad están a rebosar. Sin embargo, puede verse la unión y la buena convivencia durante los días de la romería. Sobre las mesas mucha comida. Los romeros hablan sonrientes, se unen al cante y bailan por sevillanas llenando la aldea almonteña de colorido, alegría y comunión.
En El Rocío la crisis parece no existir y si se pregunta por ella la respuesta siempre es parecida: "el Rocío no sabe de crisis, la Virgen nos llama cada año y no podemos fallarle", comenta un devoto.
Las 107 hermandades filiales se presentaron ayer ante la Virgen con la Hermandad Matriz como anfitriona.
Ya se disfruta de la aldea. Tras un largo camino que para todos "tiene recompensa" lo que les queda ahora es esperar el momento en el que la Virgen salga en procesión el lunes de madrugada, cuando sus fieles la alcen hasta el cielo. Los romeros se acercan a la ermita en un ir y venir de gente. Miles de personas se acercan cada día a presentarse ante la Reina de las Marismas, que todavía aguarda en su ermita. Los fieles de rodilla, frente a la Virgen, le presentan sus rezos y promesas. Algunos guitarra y cajas en mano se postran frente a Ella para dedicarle sus cantes de la forma más emotiva. Así, mañana por la madrugada tendrá lugar el momento más esperado de la Romería del Rocío. Miles de personas se agruparán a las puertas de la ermita esperando ver salir a la Virgen a hombros de los almonteños. Una mezcla de emoción y fe rociera inundará las calles de la aldea y miles de lágrimas brotarán de los ojos de los fieles. Así comenzará laa procesión de la Virgen que saludará a sus devotos en su recorrido habitual.
Tras el recorrido, la romería continuará, pero la tristeza inundará los corazones de los rocieros que deben decir un año más adiós a la Blanca Paloma.
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