Parecen esculturas alienígenas: El paisaje más sorprendente de Huelva que debes ver

Caminar por un paisaje insólito que parece sacado de una película de ciencia ficción es posible en Huelva. Este enigmático lugar ha revelado, tras la bajada de sus aguas, un conjunto de formaciones geológicas sorprendentes.

Para poder verlas, hay que ir hasta el embalse de Gossan, en Minas de Riotinto, un enclave único y especial donde los colores mineros se entrelazan para hacer su magia "alienígena".

Tras años de acumulación de minerales en sus aguas, la bajada del nivel del embalse ha dejado al descubierto un fenómeno que desafía la imaginación: Las geoformas de precipitación, estructuras que parecen esculturas naturales de otro mundo.

¿Qué son las geoformas de precipitación?

Estas geoformas emergen con formas arborescentes y ramificadas que recuerdan a árboles petrificados, muchas más grandes que una persona. No se trata de caprichos de la naturaleza al azar: Según los geólogos Juan Antonio Morales y Francisco Macías, de la Universidad de Huelva, estas formaciones son el resultado de años de precipitación de minerales sobre la vegetación que quedó sumergida en las aguas ácidas del embalse.

El proceso es fascinante y relativamente simple: Los ciclos de subida y bajada del nivel del agua, combinados con periodos de evaporación, provocan que los minerales se depositen y construyan estas formas únicas.

Un paisaje que sorprende a científicos y curiosos

Más allá de su valor científico, estas geoformas ofrecen un paisaje visualmente impactante, con colores y texturas que cambian según la luz del día. Algunos visitantes confiesan sentirse como si caminaran sobre un planeta desconocido, mientras que expertos destacan que este entorno se ha convertido en un laboratorio natural perfecto para estudiar fenómenos de precipitación mineral y geología extrema.

¿Se puede visitar?

El embalse de Gossan-Cobre se encuentra en Minas de Riotinto, y aunque se puede acceder por carretera, conviene informarse previamente sobre el estado del embalse y las posibles restricciones, ya que es una zona con actividad minera.

La mejor época para apreciar las geoformas es cuando el nivel del agua ha descendido, dejando al descubierto el mayor número de estructuras. Llevar calzado cómodo y cámara de fotos es imprescindible: Cada rincón merece ser inmortalizado.