Isabel Díaz, abogada onubense de origen triguereño se ha hecho viral a nivel nacional por una reflexión que hizo recientemente en X (antiguo Twitter) sobre lo subestimado que está el vivir en un pueblo, donde, asegura, los jóvenes gozan de mejor calidad de vida que en las ciudades.
En el hilo de tuits, que han tenido un alcance de más de 700.000 visualizaciones e incluso han salido en prensa nacional, Díaz defiende el vivir en un pueblo como una opción más barata que las ciudades, y pone de ejemplo su pueblo, Trigueros.
En mi pueblo, hay mucha gente joven (30 o menos) q tiene casa (con hipoteca) propia, hablo de gente con sueldos de 1.100€-1.200€.Vivir aquí es barato y el precio de las viviendas es asequible. Estamos a 15 minutos de Huelva y a 50 de Sevilla.Huir de la (gran) ciudad es bien
— Isabel Díaz ❤️🩹 ⚖️ (@Isabeldiazc92) January 24, 2024
Como se puede leer en el primero de los tuits, pone sobre la mesa una realidad que para muchos jóvenes es algo casi imposible si viven en una ciudad, pero que en Trigueros es una realidad: gente de 30 años y menos con sueldos de poco más de 1.000 euros, consiguen hipotecarse y comprarse una casa, no solo eso, sino vivir bien y con calidad de vida.
"Qué subestimados están los pueblos", la joven abogada reflexiona así lo que muchos jóvenes podrían estar perdiéndose por querer vivir en una gran urbe. Dentro de su hilo, reflexiona sabiamente sobre lo que los jóvenes tienen como objetivo hoy en día, inculcado por nuestra sociedad de imponernos un "perfil de éxito", y que viviendo en un pueblo lo conseguirían con más celeridad o, al menos, serían más felices: "Nos han vendido que el éxito es vivir en una gran urbe y tener un trabajo hiper mega guay, pero la chica de la frutería de mi pueblo vive mejor que que muchos con muchos títulos".
Por menos de 100.000€ aquí puedes comprar una casita adosada. Comer 2 personas en un bar puede salir por 20€- 25€. Una copa cuesta entre 3€-4€.Qué subestimados están los pueblos
— Isabel Díaz ❤️🩹 ⚖️ (@Isabeldiazc92) January 24, 2024
Su escrito ha tenido tantísima repercusión porque muchos jóvenes se han visto representados en su pensamiento y sus palabras "La felicidad es trabajar lo necesario para vivir bien y eso no pasa por pagar un precio prohibitivo por el alquiler de un zulo y estar al borde del infarto con 30 años por el estrés que te causa el trabajo".