Cartaya y Olímpica Valverdeña, equipos que se encuentran separados en la clasificación por diez puntos, acometerán el duelo de rivalidad onubense que para esta jornada establece el calendario del grupo I de la Segunda Andaluza Sénior con claras pretensiones de sumar los tres puntos. El conjunto andevaleño, más necesitado de puntuar, asumirá riesgos que le concedan posibilidades de sorprender al contrario de turno.

Claro está que las facilidades del cuadro cartayero serán las mínimas, puesto que también se juega en este envite muchas probabilidades de acercarse un poco más a los dos primeros clasificados, Pozoblanco y Cádiz B.

El partido se antoja más que interesante, entre otras cosas porque ninguno de los protagonistas perdió en la anterior jornada, triunfo del Cartaya en el terreno de la Roteña y empate sin goles del equipo valverdeño frente a La Palma.

A la vista de estos datos que certifican la mejoría de los dirigidos por Federico Martínez Gámez y no menos del conjunto cartayero entrenado por Manuel Juan Limón, cabe esperar un choque intenso y en el que cada balón se disputará con fuerza y no menos concentración por parte de unos adversarios que buscarán el gol.

La Palma afrontará con ambición el encuentro que jugará con el Chiclana, contrincante que no está para tirar cohetes, sexto por la cola y con tan sólo tres puntos conquistados como visitante, y que no debe ser una pesadilla para los entrenados por Juan Alfaro. Estos, tras el punto que sacaron del campo de la Olímpica la semana pasada, llegan más que motivados y dispuestos a resolver positivamente el lance para disponer de opciones de poder escalar algunos peldaños.

Tampoco el Pinzón debe encontrar muchos contratiempos en su cita con el San José, rival también hundido en el pozo clasificatorio, cuarto por la cola, precisamente como consecuencia del pobre bagaje que como local presenta en la tabla, un partido ganado, otro empatado y cuatro derrotas. Estos resultados son aún más preocupantes si se tiene en cuenta que en los seis encuentros de casa solamente consiguió marcar tres goles, cifra que deja muy claro que su pólvora no es la mejor.

Ahora lo que hace falta es que los palermos se hagan fuertes, sepan buscar las cosquillas al conjunto sevillano y se traigan unos puntos que le permitan mirar desde otro prisma la complicada situación en la que están ahora, segundo por abajo y con seis puntos menos que el siguiente clasificado.