Un juzgado de Valverde ha decidido abrir un segundo proceso relacionado con la muerte del vecino de Calañas Ramón Cuaresma y que se centra en los incidentes o disturbios registrados en esta localidad del Andévalo tras la puesta en libertad bajo fianza de 6.000 euros del presunto culpable de dicha muerte.

Según recordó ayer Rafael Villegas, abogado del presunto homicida, dichas diligencias se derivan del atestado que presentó en su día la Guardia Civil tras los incidentes acaecidos tras la puesta en libertad del detenido, y que provocaron la marcha de éste y de parte de su familia de la localidad, en prevención de nuevos disturbios.

Así, han sido identificadas al menos cinco personas que, de momento, no están acusadas debido a que aún se está en la fase de instrucción.

Mientras tanto, se desconoce el paradero del presunto homicida, ya que se desconoce si ha regresado a la localidad calañesa, donde la convivencia ciudadana recobró semanas atrás la normalidad después de algunos días de agitación debido al rechazo social que supuso la puesta en libertad del detenido.

Por otro lado, Villegas no pudo precisar cuándo tendrá lugar la vista oral por la muerte de Ramón Cuaresma, ya que todo dependerá de cuánto dure la fase de la instrucción en la que también se encuentra este caso. Del mismo, lo último que se conoció fue el informe que emitió el Instituto Nacional de Toxicología de Sevilla y en el que se decía que el fallecido había "ingerido grandes cantidades de alcohol" ya que la tasa registrada fue de 0,75 y 1,04 gramos por litro de sangre (g/l) y de humor vítreo -líquido gelatinoso y transparente que rellena el espacio comprendido entre la retina y el cristalino-, respectivamente, en el momento de su muerte.

El letrado indicó que el informe de la Fiscalía es "muy significativo" ya que "descarta" que la causa de la muerte fuera "atropello doloso", señalando que se trata de "un accidente de tráfico". Del mismo modo, apuntó que el informe alude que la víctima falleció en el acto, por lo que "la manipulación posterior del cadáver no es un hecho delictivo".