Con la puertas en las narices

EL futuro de los trabajadores de Astilleros se está convirtiendo para el PSOE en todo un problema. Los trabajadores quieren y desean saber cuál será su futuro y por ello apremian a los socialistas, autores de la actual situación, para conocer cuanto antes si tienen o no futuro laboral. No es más que eso. Decirles que van a cerrar la factoría o que se mantiene abierta y que van a cobrar a su tiempo. Ante la falta de respuestas los trabajadores se concentran y pasean cerca de la sede provincial del PSOE y esto pone de los nervios a los inquilinos. Primero fue Cinta Castillo quien los llamó incívicos por lanzar huevos contra la fachada. La presidenta de la Diputación los conminó a marchase del salón de Plenos si no se callaban -en esta ocasión con toda la razón- y ahora les colocan a la Policía delante de la sede para impedirles el paso. Las gentes de Mario Jiménez, sin duda, saben hacer amigos dando con las puertas en las narices a los trabajadores, aunque luego los recibieran.