Los recolocables confían en que no les afecte el cierre de Astilleros de Sevilla

El colectivo de recolocables procedente de Astilleros de Huelva confía en que el cierre de la atarazana de Sevilla, conocido ayer, no afecte a los compromisos que tienen contraídos con la Administración andaluza, por los que esperan ser incorporados a la actividad de la empresa Cotnsa en las instalaciones onubenses.

En declaraciones a este diario, el representante de los trabajadores, Braulio Cabalga, se mostró tranquilo con la incidencia que el cierre sevillano pudiera tener en su situación, y expresó su total solidaridad con sus ex compañeros.

"Hace ya dos años que los dos astilleros tomaron caminos separados, aunque hay muchas cosas que tenemos en común, como el administrador único. Pero espero que esta nueva situación no afecte a lo pactado, firmado y comprometido con la Administración. No tiene nada que ver, aunque nunca se puede poner la mano en el fuego", explicó.

Cabalga aseguró que aunque "ya estábamos escuchando que había problemas", el anuncio de cierre en Sevilla "nos ha sorprendido a todos". "Parecía que se había apostado por la continuidad del astillero de Sevilla pero parece que el cierre viene por no contar con el apoyo de los armadores, de la Administración y de los bancos, ya que nadie ponía dinero", comentó.

En rueda de prensa en Huelva, el secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, se refirió al cierre hablando de "premeditación". "Parece que era muy duro cerrar los dos astilleros de una vez y se optó por cerrar uno un ratito antes que el otro para no coincidir".

Para Carbonero, hay una clara responsabilidad del antiguo propietario de los centros de Huelva y Sevilla, que "ha arruinado a los dos", después de haber obtenido "muchísimo dinero público". Aunque cree que la gravedad es mayor en esta ocasión ya que "se intervino el de Sevilla para salvarlo" y su actividad fue "uno de los argumentos para la tremenda inversión realizada en la exclusa del Guadalquivir". "Se pueden pensar las cosas un rato antes", añadió.

Braulio Cabalga, por su parte, cree que hay "paralelismos" en el cierre de ambos centros, y aconsejó que, tras lo visto en Huelva, más que luchar "por mantener el sector naval, deberían pensar ya en el futuro de los compañeros". "Hemos hablado con ellos y tienen todo nuestro apoyo y solidaridad, y les acompañaremos en sus manifestaciones", afirmó.

Los recolocables onubenses esperan que en los próximos días se haga efectiva la entrega del buque 827, que desbloquee las indemnizaciones pendientes, mientras llega la carga de trabajo prevista este mes para que aumenten las contrataciones de Cotnsa.