La presencia o ausencia de Morante era la comidilla de los aficionados en los corrillos previos a este acto, fiel a la fecha del Lunes de Pascua, que abre la espita de la amplia parafernalia taurina que precede al ciclo continuado de festejos. Se habían hecho gestiones al más alto nivel para que el diestro de La Puebla, que atraviesa un delicado momento personal, estuviera presente en la Fundación Caja Rural para recibir junto a Victorino Martín -el único que compareció- estos premios Pepe Luis Vázquez que ya alcanzan su XVIII edición. Pero, una vez más, no pudo ser…

En el mismo envite también tenía que haber sido entregado el trofeo José Luis García Palacios que había sido concedido al criador, catedrático y presidente de la Real Academia de la Lengua Española, Santiago Muñoz Machado, que fue suplido por su hijo Jorge por encontrarse citado en Madrid por el mismísimo Rey de España.

José Luis García-Palacios Álvarez, presidente de la Caja Rural y su Fundación fue el encargado de abrir este acto que reúne a la grey taurina y la sociedad sevillana en espera de los días grandes. García-Palacios situó al toreo dentro de la mejor cultura de nuestro país y habló de virtudes como el respeto y el esfuerzo como motores de la libertad para gozar de este espectáculo inigualable. Pero el presidente de la Fundación Caja Rural también tuvo unas palabras especiales para el dúo Los del Río, presentes en el evento, al cumplirse el 30 aniversario de su famosa Macarena.

El mismo acto, como es tradicional, sirvió para presentar el anuario Maestranza que cumple 26 ediciones bajo la coordinación del veterano periodista taurino Carlos Crivell -flamante biógrafo de Espartaco- que hizo un cumplido repaso de la nómina humana y el elenco periodístico -gráfico y literario- que late en las páginas de esa publicación que resume lo acontecido durante la temporada 2023 en las plazas objeto de los premios: las de Sevilla, Huelva, Jerez de la Frontera, El Puerto de Santa María y Córdoba. El libro número 27, advirtió Crivell, había empezado a escribirse este mismo Domingo de Resurrección...

Después de la lectura del acta, que ofició Manuel Ruiz Rojas, tocaba entregar los trofeos. Morante de la Puebla, premiado como triunfador de la pasada temporada en las plazas objeto del premio, tuvo que ser representado por su primo y mozo de espadas, Juan Carlos Morante, que recogió la estatuilla de Nacho Martín de manos del teniente general Carlos Melero, jefe de la Fuerza Terrestre. El eco de su paso por la Feria de Abril del pasado año -con la cima del rabo cortado al toro Ligerito de Domingo Hernández- seguía vivo entre los presentes aumentando el volumen de la ausencia.

El ganadero Victorino Martín, por su parte, recibió la distinción a la mejor ganadería de manos de Álvaro Pimentel, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla. El juego de la camada jugada el pasado año y, especialmente, la corrida que saltó en Sevilla, fueron su mejor aval. Era la tercera vez que el criador de Galapagar recogía la preciada estatuilla que agradeció especialmente el “compromiso de la Caja Rural por la España vaciada en su apuesta por el mundo del toro sin ningún tipo de complejos”.

El trofeo José Luis García Palacios, que distingue a las personas o entidades que más se hayan distinguido por la defensa o promoción de la fiesta taurina fue entregado a Jorge Muñoz-Machado en nombre de su padre por José Luis García-Palacios que excusó a su progenitor subrayando su amor “por el campo, el toro y su tierra”.

Como es tradicional, todos los galardonados recibieron además un jamón de la Denominación de Origen Protegida Jamón de Jabugo de manos del presidente de esta, Guillermo García-Palacios Álvarez. El edil Álvaro Pimentel fue el encargado de cerrar el acto alabando el compromiso taurino de la Caja Rural y la Junta de Andalucía antes de renovar la apuesta del gobierno municipal con la tauromaquia, considerada una de las fiestas mayores de la ciudad de Sevilla. “Vamos a defender a ultranza la Fiesta Nacional sin complejos y sin justificarnos”, proclamó. Amén.