El Club de Golf de Bellavista, en crisis por el descenso de socios

El Club de Golf de Bellavista, decano del golf andaluz, tiene una trayectoria casi centenaria -en 2016 cumplirá cien años-, y siempre se ha caracterizado por ser un club social, por donde han pasado distinguidas personalidades de Huelva y de la antigua Compañía de Río Tinto, explotadora de las minas. Un club privado que siempre se ha autofinanciado con las cuotas de sus socios, cuenta entre sus instalaciones, además de con un campo de 18 hoyos, con pista de tenis, pádel y squash, cuyos derechos de explotación tiene cedidas por 25 años a una empresa. También cuenta con pista de fútbol y baloncesto, salón de juego de cartas y billares, piscina, guardería, sauna, terraza-bar y restaurante. En el ámbito de los clubes de Golf podemos distinguir entre clubes comerciales, aquellos cuya especialidad es atraer a turistas de golf del extranjero (del norte de Europa principalmente) y cuentan con pocos usuarios autóctonos; y clubes sociales con gran cantidad de socios, como es el caso del Bellavista, que además de ser un Club de Golf, es un punto de encuentro de relación social y de ocio entre sus abonados.

El Club de Golf de Bellavista es uno de los principales clubes de la provincia afectados por la crisis económica. Con 361 inscritos en la actualidad, ha venido sufriendo un descenso del número de socios con motivo de la crisis, habiendo descendido 120 el número de abonados (-25%) en estos dos últimos años. "Nuestros problemas económicos están teniendo lugar principalmente por la caída de socios", comenta Carlos Ortega Amézaga, presidente del Club de Golf de Bellavista.

El responsable de la directiva del Club explica sus políticas para paliar los problemas financieros, que principalmente han conducido a dificultades de pago con sus trabajadores, a quienes adeuda más de 80.000 euros. "Estamos centrándonos en una doble campaña: captación de nuevos socios para el Club, y mantenimiento de los socios que ya tenemos para evitar esta sangría de bajas que estamos sufriendo", comenta el presidente Ortega.

Para ello han realizado una reestructuración de cuotas. Los afiliados nuevos tendrán dos ventajas. El primer año de inscripción pagarán un 30% menos que el resto, y no tendrán que abonar la fianza de entrada, actualmente de 2.500 euros. Para entrar en el Club se requiere también la invitación de uno de los socios y la aceptación de la junta directiva. Para los abonados habituales, su política está destinada principalmente a los que practican poco el golf. "La gente que juega poco es la que se ha ido dando de baja. Potenciando el juego y las facilidades a ese grupo pensamos que se aficionaría más y no abandonaría el Club", declara el presidente del Bellavista. Si antes un socio individual pagaba 87 euros mensuales y cada juego le costaba 5, ahora pagará 100 euros al mes, pero tendrá un total de ocho juegos gratuitos. La cuota para los juegos en pareja es distinta: anteriormente un jugador que iba acompañado de su pareja pagaba 103 euros, y ahora pasará a pagar 170 con los mismos juegos gratuitos. "Nos parecía discriminatoria la poca diferencia con el juego individual", dice Ortega.

La directiva del Club adelanta que las medidas están empezando a tener sus frutos. "Este año hemos hecho 30 socios nuevos y se dieron de baja otros 30. La campaña de nuevos socios funciona, tenemos que seguir incidiendo en mantener los que ya tenemos", declara el presidente.

Entre los problemas financieros del Club, está la deuda que mantiene con su plantilla de trabajadores, 16 en total, que supera los 80.000 euros. "El 65% de los gastos que tiene el Club va para pagar las nóminas de los trabajadores, y creemos que con la situación que estamos atravesando, es excesivo", mantienen desde la directiva. Esta junta, que entró en octubre de 2011, comenzó haciendo una propuesta a la plantilla de trabajadores de rebajarse el sueldo un 20%, para poder hacer frente a los problemas de liquidez, medida que rechazaron los trabajadores.

La situación de impagos creó conflictos entre la directiva y los trabajadores, estos últimos a través del sindicato UGT. Comenzaron a tener lugar reuniones para establecer un convenio que fuera satisfactorio y pusiera remedio a los problemas económicos del Club. Entre las medidas propuestas por la UGT se contempla la aplicación de un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo), que supondrían un ahorro de 200.000 euros al Club, según declaraciones del secretario general de la Federación de Servicios de UGT Huelva, Antonio Expósito. El presidente del Bellavista niega que ese ahorro sea real y añade que sólo supone una solución parcial y puntual, no total. "La UGT siempre habla de un ERTE que nunca ha enseñado sobre el papel", apostilla el presidente Ortega.

La propuesta que ya estaba encima de la mesa entre directiva y trabajadores consistía en la aplicación de un ERTE de dos años, incluyendo una tabla salarial. Según el responsable de la directiva, la nómina de los trabajadores iría en función del número de socios, de forma que tendría que bajar el 20% con 360 socios, número actual, y subiría o bajaría en función de la oscilación positiva o negativa de afiliados al Club. Pero esta propuesta quedó en papel mojado al intervenir en la negociación Antonio Expósito, según comenta el presidente del Club, llegando a una situación de ruptura del diálogo. Finalmente, tras un tiempo sin avanzar en la resolución de la problemática que atraviesa el Bellavista, ambas partes volvieron a sentarse y que llegaron a un principio de acuerdo, consistente en un ERTE de un año, donde no se contempla tabla salarial en función del número de socios.