El CSIC pide que no se permita el dragado de lodos sin los científicos

El director de la Estación Biológica de Doñana (EBD) y coordinador institucional en Andalucía del CSIC, Fernando Hiraldo, solicitó ayer a las autoridades competentes que no permitan que se haga el dragado del río Guadalquivir sin el apoyo de los científicos. Hiraldo realizó esta petición después que el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, haya puesto reparos a la actuación del Puerto del Sevilla y achacado falta de cautela científica al dragar los lodos.

El Puerto de Sevilla comenzó a principios de este mes las obras dirigidas a limpiar los lodos del fondos del estuario del río, en concreto en el canal de navegación en el tramo más cercano a Doñana y a la desembocadura. Los trabajos han empezado sin contar con los científicos que debían hacer el seguimiento y analizar cómo afectan las obras a la biodiversidad.

El director de la EBD criticó que no se tenga en cuenta el estudio científico que se realizó sobre el dragado, considerado por la comisión externa que se constituyó tras su presentación como un trabajo ejemplar, magnífico y a tener de guía. "Tenemos que aprovechar lo que está hecho", espetó Hiraldo, quien explicó que el reto que se planteó desde el primer momento no fue dragado sí o no, "sino que el Guadalquivir se muere y hay que salvarlo".

En opinión de Hiraldo, las autoridades competentes no deberían permitir bajo ningún concepto que el dragado se haga sin el apoyo científico y sin que sirva de parte experimental para conocer el impacto real que tiene sobre todo el ecosistema. "Del río dependen muchas más cosas además de los barcos que navegan por él, luego es preciso tener una visión global y seguir las pautas que ya están establecidas en el informe. El dragado de mantenimiento hay que hacerlo de acuerdo con los científicos que han hecho el estudio", subrayó el coordinador andaluz del CSIC.

Mientras, la Comisión de Biodiversidad del Consejo de Participación del Espacio Natural de Doñana ha respaldado las conclusiones de la Comisión Científica encargada del Estudio del Dragado del Guadalquivir.

El unánime respaldo se produce a raíz de la propuesta formulada por WWF, quien reclamaba un pronunciamiento expreso de este sanedrín, si bien su valor radica en que tanto el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, como la Consejería de Medio Ambiente, Espacio Natural de Doñana, Estación Biológica de Doñana, Ecologistas en Acción, SEO/BirdLife, UGT, Asaja, Fundación Doñana 21 y varios ayuntamientos suscribieron la propuesta.

El responsable de la Oficina Técnica para Doñana de WWF, Juanjo Carmona, se congratuló que a efectos prácticos el apoyo tumbe el proyecto de la Autoridad Portuaria de Sevilla de profundización del dragado. Eso sí, es necesario desmarcar este proyecto del que actualmente se ejecuta en el río (limpieza de lodos) con el fin de extraer los lodos que colapsan la zona navegable, actuación que sí cuenta con la pertinente autorización por parte del Ministerio de Medio Ambiente que, aun así, ha reprochado a los promotores que no cuenten con la supervisión científica.

Carmona relató en su comparecencia frente a los medios que su propuesta se ha visto enriquecida "con las aportaciones de otros miembros de la Comisión", a la par que "alabó el rigor del estudio científico que ha permitido conocer más en profundidad la realidad del Guadalquivir". La propuesta final será ahora elevada al Pleno de la Comisión Permanente del Consejo de Participación, que se celebrará el 21 de julio en Aznalcázar, si bien nada hace indicar que los respectivos actores viren su postura.

Para los ecologistas el dragado del río tiene implicaciones medioambientales que no se pueden poner en riesgo por simple intereses mercantiles. De igual modo la Unesco ya ha mostrado su preocupación por los riesgos que entraña esta obra de ingeniería, a la par que ha puesto en antecedentes a los distintos organismos de que el Comité del Patrimonio examinará en 2013 el estado de Doñana con el fin de determinar si cumplen con todos los parámetros de respeto medioambiental, así como el merecimiento de la renovación de los diplomas o, por el contrario, ha de ingresar en la Lista del Patrimonio de la Humanidad en Peligro.

En el otro lado se hallan los intereses del Puerto de Sevilla, que ve como los 200 millones de euros invertidos en la nueva exclusa puedan quedar en entredicho por las limitaciones para que atraquen grandes buques. Sin embargo, ello no puede obviar que los científicos alertasen de que una actuación de este tipo llevaría aparejado una repercusión "negativa en la dinámica, morfología y biodiversidad del estuario". Para más inri cabe sumar la salinización de su caudal como consecuencia del mayor aporte de entrada de agua de mar por las corrientes en sentido ascendente y descendente que alimentan al río.