Había cierto temor flotando en el ambiente de que las obras de peatonalización en el centro de Huelva no acabaran a tiempo para la Semana Santa, para que no interfirieran en el paso de las hermandades por la carrera oficial y las calles más céntricas. Pero acabaron en plazo. Al menos en La Palmera, donde ya se ofrece una nueva puerta de entrada al centro urbano, totalmente renovada y despejada, estrenada por los onubenses este Viernes de Dolores. Los remates pendientes vendrán después de las vacaciones, como en Méndez Núñez y Gravina, donde continuarán con el enlosado pausado ahora. Es justo reconocer el esfuerzo hecho.