
Quousque tandem
Luis Chacón
Todología Aplicada
Si hay algo realmente enojoso e inaceptable entre los muchos defectos que se le atribuyen al gobierno de Sánchez (con su fango, su desinformación y su apagón a cuestas) y a todos sus ministros, es que falten continuamente a nuestra inteligencia, tomando a los ciudadanos por tontos. Y no es que no haya razones para pensarlo de muchos que parecen aceptar y apoyar todo cuanto predica el ejecutivo, es que es inadmisible que se nos engañe descaradamente por parte del presidente y se vea secundado por su corte de ministros repitiendo a diario como adiestrados papagayos cuantas consignas se dictan desde Moncloa. El clásico engañabobos. Es más, porque incluso cuando algunos de sus críticos hablan de la habilidad de Sánchez para embaucar a los españoles en lo que llaman “el relato”, uno se pregunta ¿qué relato?... ¿esa sarta de mentiras, de manipulaciones, de discursos triunfalistas y autocomplacientes y de falsas promesas que suelen ilustrar sus discursos? Como lo es también su continua negativa a responder a esas preguntas que todos nos hacemos y que jamás contesta. Mejor dicho responde con insultos, con difamaciones, culpabilizando siempre a la oposición y dispersando sus propias responsabilidades. La culpa de tantos desaciertos siempre es de otros. Por supuesto de la oposición ultraderechista. Su paranoia.
Otra de las humillaciones a las que este Gobierno se ha habituado, arrastrándonos en esa indignidad a todos los españoles con un sentimiento honrado y fiel a la constitución y a nuestro país, es esa dependencia sumisa y rastrera a cuanto convenga a Puigdemont, del que se ha convertido en una auténtica marioneta con tal de seguir al frente del Ejecutivo. El último de esos casos de absoluta obediencia a los designios del cobarde fugitivo de la Justicia es el insólito invento de una consulta pública sobre la OPA al banco Sabadell como Junts le exige, siguiendo su vía unilateral y su denodado afán intervencionista, una maniobra para salir de la encrucijada en la que el informe favorable de la CNMC ha comprometido al Gobierno. Inconcebible en una economía de libre mercado.
En esta jungla donde decide la extrema derecha nacionalista, voraz e insolidaria, la izquierda también, aunque teóricamente pueda repugnarle, las alimañas del análisis político, sesgado y sectario, hacen de las suyas a buen recaudo en los medios afines al Gobierno. firme en su propósito de desterrar los orígenes y convertirlos en consensos envenenados y arteros. Una constante ceremonia de la confusión con efectos disuasorios o de distracción sobre la ya de por sí anestesiada ciudadanía.
Entre tanto se imponen los prejuicios ideológicos a las decisiones correctas, evidenciando una ausencia de capacidad de gestión, una ostensible incompetencia, haciendo de sus comparecencias auténticos fraudes dialécticos. Y la mentira que no cesa: el presidente dice que no hay uranio en España y los yacimientos de Salamanca abastecerían en 20 años a todas nuestras nucleares.
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