Huellas del estío

Se va el mes de Agosto. El verano tan esperado, cuando las carretas volvían del Rocío, ya se apaga en ese adiós anual en que quisimos soñar a la orilla del mar, dejando nuestra huella de ilusiones y de sueños junto a una concha, varada entre el vaivén de las olas que besaban la playa antes de volver a su lecho de eternidad azul.

Siempre el verano fue la estación deseada y esperada para llenarnos de ese aire de libertad que el trascurso del año nos impedía en la rutina cotidiana del trabajo y las preocupaciones.

Este Agosto, que ahora termina, nos marcó sensaciones distintas, la alegría de la reunión familiar por un lado, y la tristeza de los amigos que no acudieron a la cita.

Y siempre el caminar de los días con sus novedades para el comentario de todos: el silencio sin música en los chiringuitos de Punta Umbría, el cierre de algunos de ellos, las obras en ciertas calles en plena canícula, la falta de aparcamientos que hacen imposible el desplazamiento urbano… Cosas que desgraciadamente se repiten una y otra vez sin al parecer, soluciones definitivas.

Lo mejor fue la animación en los festejos de cada pueblo costero en sus fiestas principales, donde no faltaron atractivos espectáculos musicales, como los iniciados en la capital donde tuvimos unas esplendidas Colombinas llenas de luz y color, diversión, animación y toros, gracias al tesón sin pausas de nuestra alcaldesa, Pilar Miranda, volcada en que la ciudad continúe su ritmo de progreso, abierto al futuro.

La sorpresa del mes para los onubenses: ver el Muelle de la RTC por fin unido, en los dos tramos que tan inoportunamente cortaron hace décadas.

El invierno y otras estaciones están para que las obras se lleven a cabo. El verano para disfrutarlas.

Nuevamente hay que felicitar a Niebla por su programación estival y a la campaña de cine al aire libre en los pueblos de la Sierra, en una apuesta anual de la Diputación que siempre es bienvenida.

Ahora, poco a poco, llegará el sosiego. Septiembre nos ofrece un clima ideal para poner broche final al verano y donde no faltaran fiestas en toda la provincia en honor de las Patronas.

Huelva siempre abierta a la belleza, la cultura y a un auge que es necesario reforzar en comodidades, organización y publicidad más efectiva.