Cuenta Huelva con el parque urbano más extenso de Andalucía, el Parque Moret, con una superficie de 30 hectáreas, que fue inaugurado hace dieciséis años, concretamente el 20 de enero, festividad del Patrón de la ciudad, San Sebastián, de 2007, un espacio natural con una gran variedad de flora y fauna, en plena ciudad. Un lugar idóneo para tomarse un respiro, pasear en medio de la naturaleza, practicar deporte o disfrutar de una jornada de convivencia con familia o entre amigos en la zona de las barbacoas.

A lo largo de estos años se han ido ampliando sus dotaciones, aunque aún queda por hacer. El denominado Pulmón Verde ofrece al visitante una diversidad de opciones para realizar al aire libre, hay áreas infantiles, un skatepark, zonas de parkour, un circuito biosaludable, así como senderos y caminos que recorrer disfrutando de su riqueza natural.

También alberga los huertos urbanos, junto al Aula de la Naturaleza, donde los hortelanos se entretienen trabajando la tierra y recogiendo sus frutos.

El Parque Moret es un lugar único que habría que conservar y, sin embargo, no se libra de los actos vandálicos, que se suceden fundamentalmente con el mobiliario urbano, que aparece quemado o destrozado, como es el caso de los bancos, entre ellos, los primeros con los que se dotó el parque, realizados con troncos de árboles, cuyas piezas aparecen arrancadas, o de los colocados recientemente, algunos ya han sido pasto de las llamas.

En cuanto a las barbacoas, operarios, encargados de la conservación de los parques de la ciudad, tienen que repararlas constantemente, soldar partes metálicas de las mismas para que puedan volver a ser operativas. Ni los huertos urbanos se libran de los destrozos. Ya en su día, debido a estas acciones incívicas, el Parque Moret se quedó sin las barcas de la laguna y sin la caseta y el embarcadero, que suponía uno de sus principales atractivos.

A todo esto se unen las pintadas, no hay ni un espacio que se libre de ellas, ni siquiera los juegos de las áreas infantiles. Hay en algunos un afán de destrucción de lo público, de dejar su huella por allí por donde pasan y el Parque Moret debe ser uno de sus escenarios favoritos. Se realizan inversiones en el Pulmón Verde para mejorar sus infraestructuras y dotaciones y parece que están esperando a que haya alguna nueva para dejar en ella su firma, la marca del incivismo.