S y poemas, un ramillete de sentimientos es el título del libro de uno de los poetas onubenses más prestigiosos y valorados de esta tierra, Manuel Sánchez Tello, que nos permite sensibilizar gratamente sus exquisitas virtudes poéticas y especialmente su admirable y delicada capacidad en la composición de sus sonetos, de los que este ejemplar nos brinda toda una muestra fascinante, exuberante y sugestiva. Es bastante explícito y revelador en cuanto a la calidad y notable inspiración del autor, el prólogo que escribe Sixto Romero Sánchez, presidente de la Academia Iberoamericana de La Rábida, de la que es miembro desde su creación, el profesor Manuel Sánchez Tello, cuando afirma: “Este libro recoge 215 poemas construidos de tal manera que obtiene, a mi juicio, nuevos rendimientos significativos y expresivos sobre la permanente y constante presencia de valores… que hacen realidad la utopía de que todos los mitos y todos los sueños tienen algo en común, todos ellos están escritos en el mismo idioma: el lenguaje simbólico…”.

Se suma a la introducción del libro, Manuel Rubio García, de la Fundación Musical Onubense Primitivo Lázaro y María Carrasco, el inolvidable e ilustre compositor y su esposa, que esta selección de sonetos dedicados “a instituciones, familia, escritores, amigos, religiosos íntimos… y otros acontecimientos históricos” no podían faltar en el inmarcesible recuerdo de una amistad entrañable y “el apoyo constante en la difusión” de su impagable legado musical. Como es interesante la experiencia de Melchor Lecumberri Esparza, primo del autor, que nos relata como se elaboró la edición del libro y la entidad de los afectos que entraña una obra tan singular por cuanto el propio profesor Sánchez Tello tiene un capítulo de íntimos agradecimientos y reitera ciertos términos que. confiesa, “responden a una inevitable preocupación y admiración por el maravilloso mundo en que vivimos”.

El poemario es un continuo y emotivo desgranar la rima armoniosa y deslumbrante de “entrañables versos octosílabos”, como dice el autor, consecuencia justa de recuerdos y evocaciones, de vivencias fraternales y amistosas, de los afectos más personales, expresados con la sinceridad más luminosa, con la rutilante inspiración que imprime al verso el rasgo de su propia confesión. En este “ramillete de sentimientos” Manuel Sánchez Tello rima con sus cautivadoras expresiones poéticas todo un fluido y caudaloso torrente “de luz y de belleza”, de recuerdos, de sensaciones, de inolvidables convivencias, de amistad, de fidelidad y lealtad, de cercana intimidad, de confianza, de familiaridad y de amor, “de unos versos dedicados a mis amigos y al Universo en que vivo”. La sensible percepción del poeta explicitando nítidamente sus emociones. Y la inspiración prodigiosa iluminando un ámbito poético inagotable y fecundo: “que para siempre dure en los sentidos/ cuartetos donde escribo y tan me pierdo/ en buscar tu florido corazón”.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios