Probablemente los ateos no existan, disfruta tu religión

Afortunadamente para la UAL (Unión de Ateos y Librepensadores) nuestra ciudad no tiene entidad suficiente en el contexto de la nación para implantar aquí su campaña del 'Bus ateo'; sí, esos que en la 'trasera y en los costeros' llevan una propaganda que dice "Probablemente Dios no exista, deja de preocuparte y disfruta la vida".

Siempre me hizo gracia la expresión que afirma que hay muchos que son ateos gracias a Dios, y en Filosofía decíamos que para negar algo antes hay que afirmar su existencia, o algo parecido. Así que los ateos no la deben tener todas consigo.

No me importa lo que cada uno pueda pensar de la religión, de la nuestra o de las otras, vaya por delante mi más seguro respeto por todas las creencias y las increencias, allá cada cual. Pero de todo esto lo que más me molesta como católico es el manoseo que se traen con el Sagrado Nombre de Dios, utilizado, manipulado y arrastrado por el lodo de campañas publicitarias provocadoras y absurdas. Ni tan siquiera me agrada en la ampulosa voz del cofrade cuando ve pasar una imagen de Cristo y dice que es Dios mismo caminando por nuestras calles, Dios crucificado... Toman y tomamos su Nombre con suma ligereza, para negarlo y para afirmarlo.

Esta campaña de 'Buses ateos' ya ha conseguido el fin que perseguía que no es otro que sembrar la discordia en la sociedad y molestar, por no decir cabrear, a una buena parte de ella. Pero claro, ofender a la Iglesia y a los creyentes no cuesta nada, y además da puntos para el carné de la falsa progresía, en aras de una malentendida libertad. Porque aquí , reconozcámoslo, nos llevan ventaja, cuentan con nuestro silencio y saben que no actuaremos, ni protestaremos; y miraremos para otro lado en eso que los franceses dicen "laisser faire, laisser passer"(Dejar hacer, dejar pasar) que se ha instalado en nuestra acomodaticia sociedad que llaman del bienestar, antaño más combativa y misionera, que permitirá abortar a niñas con dieciséis años sin el consentimiento de sus padres, pero que necesitará la firma de este para que la misma niña pueda ir de excursión con su colegio.

Y esta campaña zafia, pero al mismo tiempo sibilinamente inteligente es sólo reflejo de otras: educación, familia, laicismo... Y en las que se relaciona la pretendida inexistencia de Dios con la felicidad.

Y nosotros los creyentes, los cofrades, sabemos que sin Él no hay felicidad posible. Si no, explíquenme que es lo que sienten ustedes al ver pasar a su Cristo triunfalmente por la calle, o besan en la cercanía del corazón la mano de la Virgen, ¿es o no es lo más parecido a la felicidad? Y esto mismo que nosotros lo sienten millones de personas.

Por eso, no se preocupen, probablemente los ateos no existan, o no sean tantos. Así pues, disfruta de tu religión, vive tu Semana Santa.